Compañías y agencias de publicidad on line discuten con los partidarios de la privacidad, ingenieros y responsables técnicos para definir un estándar que limite el registro on line de las actividades en Internet
Por Natasha Singer | The New York Times
En los últimos meses, un esfuerzo internacional por dar a los consumidores más control sobre la recolección de sus datos on line ha desembocado en discusiones agrias, insultos y cazas de brujas.
La idea era generar un estándar global para No Rastrear (Do not track), una opción de configuración de los navegadores de la red que permitiría a los usuarios de Internet dar aviso a los sitios, las redes publicitarias y los brokers de datos que no quieren que se rastreen sus actividades de navegación con propósitos de marketing.
Pero algunos ejecutivos del sector involucrados en las negociaciones han cuestionado los objetivos de los partidarios de la privacidad, diciendo que sus esfuerzos amenazan con socavar el ecosistema publicitario que alimenta productos y servicios gratuitos on line. Al mismo tiempo, algunos expertos en tecnología y defensores de la privacidad han acusado a ejecutivos del sector de arrastrar los pies y actuar de mala fe.
A esta batalla llena de rencores se agrega un nuevo mediador, Peter Swire , profesor de derecho de la Ohio State University y ex funcionario de la Casa Blanca para la privacidad durante la administración Clinton. El miércoles el Consorcio de la World Wide Web o W3C , el organismo internacional que ha estado tratando de desarrollar los estándares técnicos del No Rastrear , dijo que Swire asumiría como co-presidente de su Grupo de Trabajo para la Protección del Rastreo.
Si bien gente de ambas partes han saludado esta jugada, muchos dijeron que dudaban de que Swire pudiera lograr un acuerdo entre los que se enfrentan, especialmente en momentos en que algunos grupos del sector están cuestionando que el W3C sea un foro apropiado.
Por un lado, los ejecutivos del sector tienen interés en proteger los avisos «conductistas», campañas de marketing que usan datos sobre las actividades de un individuo online para adecuar avisos a esa persona. Por el otro lado, defensores de los consumidores sostienen que los usuarios de Internet deben poder limitar ese tipo de vigilancia online.
Swire, ex consejero en jefe para la privacidad en la Oficina de Administración y Presupuesto, dijo que espera lograr un equilibrio que sea aceptable para ambos bandos. Dijo que ve un sistema de No Rastrear como una especie de equivalente digital de la lista de No Llamar, un registro nacional en Estados Unidos a través del cual los consumidores pueden optar por no recibir llamadas publicitarias por teléfono.
«La gente puede elegir que no los llamen vendedores telefónicos durante la cena. La idea simple es que los usuarios debieran poder elegir también como funcionará su navegación por la Red» dijo Swire en una entrevista telefónica. Pero agregó: «El tema general es cómo dar a los usuarios la posibilidad de decidir respecto de su experiencia on line, permitiendo al mismo tiempo obtener fondos para una Internet útil».
Pero Swire quizás no logre superar el encono entre las partes en la negociación luego de meses de acusaciones públicas, ataques personales y recriminaciones.
Este año en un evento en la Casa Blanca, representantes del sector se comprometieron públicamente a incorporar y honrar un sistema de No Rastrear basado en los navegadores bajo ciertas condiciones. Las condiciones incluyen el requisito que a los usuarios individuales tendrían que elegir activamente la orden de no rastrear. Grupos del sector también dijeron que cualquier sistema aún así debiera permitir a las compañías recoger información acerca de las actividades de navegación de los usuarios para investigaciones de mercado y propósitos de desarrollo de productos.
Pero luego de meses de pelear con defensores de los consumidores, representantes del sector ahora dicen que el W3C no es un foro apropiado para definir los detalles de la política, sosteniendo que los conocimientos del grupo son más técnicos que prácticos.
En un foro de debate on line para el grupo de trabajo, por ejemplo, altos ejecutivos del sector han sugerido que expertos en tecnología respetados no tienen contacto con la realidad comercial.
«La gente que integra el grupo por los consumidores tiende hacia términos y soluciones absolutistas» escribió Shane Wiley, vicepresidente para privacidad y gobierno de datos en Yahoo! en un mensaje en septiembre a Ed Felten, profesor de ciencias de la computación y relaciones públicas de la universidad de Princeton. «El mundo real no es tan fácil aunque se perciba así en un aula o un pequeño laboratorio», agregó.
Y están los tecnólogos que dicen que los ejecutivos del sector ocultan los riesgos para la privacidad de la búsqueda de datos online.
«A falta de una mejor metáfora, ustedes son los escépticos del cambio climático de la privacidad informática» escribió el mes pasado Jonathan Mayer un estudiante de posgrado de ciencias de la computación y derecho de Stanford University, a Wiley de Yahoo!. «A diferencia de algunos de los miembros más pacientes del grupo, hace mucho que dejé de hacer de cuenta que ustedes negocian de buena fe».
Ahora el sector ha comenzado a distanciarse del proceso de la W3C y promueve su propio programa auto-regulatorio que permite a los consumidores renunciar a la publicidad dirigida instalando botones de compañías miembro que dan esa alternativa.
«Hemos visto vacilar al W3C» dijo Mike Zaneis, abogado general para el Interactive Advertising Bureau , una cámara del sector. «Por lo que se está redoblando los esfuerzos desde el sector para encontrar estándares significativos para controles de navegadores».
Al continuar el debate, nuevas versiones de navegadores populares como el Internet Explorer de Microsoft y el Chrome de Google (además del Firefox de Mozilla) ya han instalado la opción de No Rastrear para sus usuarios. Pero en ausencia de estándares globales aceptados para estos sistemas, las redes de avisos y los brokers de datos no están honrando los indicadores de no rastrearme. Incluso los servicios publicitarios de Microsoft y Google no responden a tales señales provenientes de sus propios navegadores.
Si bien Swire dijo que espera impulsar un avance, por el momento las opciones de No Rastrear de los navegadores no tienen más significación que los emoticones.
«El No Rastrear es una obra en curso» dijo Swire. «Tal como lo es Internet».
© NYT Traducción de Gabriel Zadunaisky