El acuerdo de precios firmado con los supermercados y las cadenas de electrodomésticos sigue generando objeciones en la oposición, los sindicatos y los economistas. Esta mañana se alzaron las voces de Hugo Moyano, Julio Cobos, Felipe Solá y Roberto Lavagna.
El ex ministro de Economía analizó la actualidad en un reportaje con Infobae, en donde proyectó que a partir “del día 61” –el 1° de abril-, los precios van a tener una fuerte escalada que tendrá un piso de 25 o 28 por ciento. Además, se refirió al cepo al dólar y a la actividad económica.
En la misma línea se expresó Cobos, quien indicó que en los próximos días el Gobierno debiera anunciar nuevas medidas para evitar una inflación excesiva una vez concluido entendimiento firmado con el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno.
“¿Por qué no realizan el acuerdo por un año? No genera certidumbre”, aseguró Cobos, quien entiende que el Gobierno “está rascando la olla” en busca de recursos en medio de una fuerte crisis que afecta al Producto Bruto Interno.
Dentro de esas políticas desacertadas, el dirigente mendocino situó los recientes “aprietes” de la AFIP a los productores rurales para que vendan la cosecha retenida de soja y liquiden las divisas correspondientes.
Es más, descartó la posibilidad de normalizar las finanzas a través de una nueva moneda siempre y cuando no se solucionen antes los problemas estructurales que a su entender generó el Gobierno con los propios “desaciertos” en materia económica.
Solá, nuevamente crítico con el Poder Ejecutivo, aseguró que el entendimiento por 60 días “no es saludable” porque va a generar “un mercado negro”. “Da una idea de intranquilidad; es difícil, casi imposible. Crea un mercado negro. Ni siquiera ellos mismos creen en el acuerdo”, declaró en diálogo con Marcelo Longobardi en Radio Mitre.
Moyano ahondó sobre el tema y apuntó al impacto que tendrá el acuerdo de precios en las paritarias: «Si un gremio discute salario hoy en base a que no va a haber acuerdo de precios, después de los 60 días se dispara”. Y recordó que la estrategia para instalar precios máximos no funcionó nunca.
«A muchos empresarios el Gobierno los presiona para que no den los aumentos salariales que piden los trabajadores (…) después del día 61 va a haber que negociar de nuevo», completó.
Desde la CGT Alsina, el secretario del gremio Luz y Fuerza, Oscar Lescano, coincidió con el resto al sostener que «el control de precios nunca termina bien» y recordó: «Hay otras cosas que se hacen en la economía, 400 productos no son la economía».
En diálogo con Radio El Mundo opinó que el congelamiento de precios alcanzado con supermercados y cadenas de electrodomésticos es la “señal” que eligió el Gobierno para «blanquear que tenemos que atacar la inflación»
fuente > infobae.com