El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, cumple el domingo dos meses de ausencia de Caracas, y aunque no se ha manifestado en público desde su cuarta operación de cáncer, el Gobierno asegura que se recupera y que se mantiene al mando, mientras Venezuela sigue sin pistas sobre su futuro político.
La última información sobre el estado de Chávez la dio la noche del jueves el canciller Elías Jaua tras visitar al mandatario en La Habana: El vicepresidente «Nicolás (Maduro), (la procuradora) Cilia (Flores) y yo acabamos de terminar un encuentro profundamente humano, hermoso con nuestro Comandante Chávez. Está en batalla…..!!», escribió en Twitter.
Altos funcionarios del Gobierno venezolano, que han visitado con frecuencia a Chávez, insisten en que el mandatario, de 58 años y reelecto el 7 de octubre, está cada vez más incorporado a sus funciones de Gobierno y que volverá a Caracas «más pronto que tarde», según el vicepresidente, pero no dicen cuándo lo hará, ni si podrá volver a gobernar, al tiempo que la oposición, en boca de su líder, Henrique Capriles Radonski, reclama su aparición pública.
«No le ayuda en términos de opinión pública al gobierno seguir dilatando esa circunstancia. Por un lado se dice que el presidente está ejerciendo en plenas facultades la jefatura del estado, pero por otro lado no hay ninguna aparición ni una nota por el twitter», explica a AFP el politólogo John Magdaleno.
El domingo también se cumple un mes del inicio del tercer mandato de Chávez, que no pudo asumir, y del mantenimiento en funciones de su Gobierno con la bendición del Tribunal Superior de Justicia (TSJ).
Magdaleno afirma que esta prolongación de la incertidumbre «pone en tela de juicio» la decisión del TSJ de avalar el aplazamiento de la toma de posesión de Chávez, sin fijar fecha, y la continuidad en funciones del gobierno al completo, lo cual sumió al país en una crisis institucional en torno a la interpretación de la constitución.
Maduro, a quien Chávez nombró su heredero político en caso de que quedara inhabilitado para gobernar y hubiera nuevas elecciones, ha sido en este tiempo la cara más visible del Gobierno, secundado por el presidente de la Asamblea Nacional (AN) y número dos del oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Diosdado Cabello, un ex militar que participó junto a Chávez en un golpe de estado fallido en 1992.
Al tiempo que han informado de las decisiones de Gobierno firmadas por Chávez en La Habana, Maduro y Cabello han lanzado una virulenta ofensiva contra la oposición, con peticiones de privación de libertad contra dos diputados del partido Primero Justicia (PJ) de Capriles, ex candidato a la persidencia derrotado por Chávez en octubre y gobernador reelecto en diciembre del populoso Estado Miranda.
«Eso te indica que la gente del Gobierno podría estarse preparando para un proceso electoral y por eso utilizan la fuerza bruta contra un partido clave como PJ», explica José Vicente Carrasquero, profesor de Ciencias Políticas de la Universidad Simón Bolívar.
Desde que fue operado en La Habana el 11 de diciembre, no se ha visto ni en público ni en fotos al mandatario, omnipresente en los medios hasta que lo golpeó la enfermedad.
Ninguno de los presidentes latinoamericanos que visitaron La Habana desde su operación ha dicho que lo ha visto.
La presidenta argentina, al dejar La Habana el pasado 12 de enero, escribió enigmáticamente en twitter «En minutos partimos de La Habana. Hasta siempre», frase que evoca la canción «Hasta siempre, comandante», dedicada al ‘Che Guevara’ cuando partió de Cuba hacia Bolivia, donde fue asesinado.
El presidente uruguayo, el ex guerrillero José Mujica, dijo a los seguidores de Chávez en un acto multitudinario en Caracas el 10 de enero: «Hay un hombre que está dando una batalla por la vida, que está en el corazón de ustedes, eso es lo que tiene sentido, pero si mañana no está, unidad, paz y trabajo».
Chávez sufrió una grave infección pulmonar tras su cuarta operación por una recurrencia del cáncer que le detectaran en 2011, lo que desató rumores dentro y fuera del país, algunos de ellos dando por muerto o en coma al mandatario. A finales de enero, el diario El País de España publicó una foto atribuida falsamente a Chávez, de un paciente intubado, que causó gran revuelo en Venezuela.
«El presidente puede estar fuera de su cargo por lo visto hasta que se recupere o muera, porque así lo estableció el TSJ», opina Carrasquero, profesor de Ciencias Políticas de la Universidad Simón Bolívar.
Para él, la incertidumbre «es insostenible», porque hay una serie de medidas económicas «que hay que tomar y no se están tomando» para atajar, entre otras cosas, la escasez de alimentos, la inflación o el endeudamiento público.
«Este año el chavismo tiene complicaciones importantes. La ausencia de Chávez ha hecho que la economía pase a segundo plano. Un ajuste cambiario, necesario por demás, ha quedado rezagado. La escasez está repuntando al igual que la inflación y la gestión fiscal se ha desacelerado», dice el último informe de la consultora Ecoanalítica.
«Para la gente va a ser insostenible cuando le golpee demasiado por ejemplo el aumento de precios y algunas cosas básicas se le hagan inalcanzables», agrega el profesor de Ciencias Políticas.
Fuente > Yahoo