Ya empiezan a faltar algunos productos en las góndolas de los supermercados

El arranque del congelamiento de precios llegó a las góndolas de los supermercados con algunos faltantes. Es el caso de azúcar y aceite. En ambas categorías no se consiguen todas las marcas disponibles y hay un límite de dos paquetes o botellas por persona o grupo familiar, dependiendo de la cadena de supermercados.

Ayer a la tarde ya no había más paquetes de azúcar de precios bajos y medios en distintos locales de supermercados ubicados en Barracas (sur de la ciudad) y Tigre (conurbano norte).

Aunque el precio del aceite de girasol es más homogéneo, en la mayoría de las sucursales también era complicado encontrar todas las marcas disponibles (Natura, Cocinero, Legítimo, Cañuelas). En ambos casos, regía un tope de dos unidades como máximo por persona o grupo familiar.

Distintos clientes de supermercados notaron esta semana otros faltantes puntuales, según el supermercado: desde carne envasada al vacío a bola de lomo para milanesa, desde leche entera en sachet a choclo en lata.

Los ingenios abastecen a los supermercados de marcas de azúcar de diferentes precios. Las hay “masivas” (de entre $ 2,90 y $4), “selectivas” (de $ 4 a $ 6) y “premium” (de $ 6,50 para arriba). “Las baratas volaron, de menos de $6 no quedó nada”, contaban ayer empleados de tres cadenas de supermercados distintas. En las góndolas donde suelen estar estos productos ayer había agujeros, que las cadenas trataron de suplir con los productos más caros (que se ubican por arriba de los $ 7).

El cartelito de “dos unidades por persona” estaba en todas las cadenas. Y viene de temporadas anteriores, según explicaron en el sector azucarero.

Los ingenios entregan a los súper una mitad de producción de precios “masivos” y “selectivos” y otra mitad de “premium”. Pero el manejo de los stocks corre por cuenta de los supermercados, según argumentan los proveedores. “Puede ser que asignen un cupo diario, que se agote rápido, pero eso no implica que no vaya a aparecer al día siguiente”, puntualizaron.

Es el caso del aceite, los precios de los productos están en las mismas etiquetas. El envase de litro y medio de aceite de girasol de “Legítimo” está a $ 7,55, mientras que el de “Cocinero” marca $ 8,31 y el de “Natura” en $ 8,38. El “Cañuelas” varía entre $ 7,62 y $ 8,15. Varios consumidores notaron que era complicado encontrar todas las marcas en una misma góndola, como para poder elegir.

“Se les informa que el máximo de compra de aceite de girasol es de (2) unidades (sic)”, se leía ayer en el cartel de una cadena. “Artículo temporariamente sin stock”, indicaba un letrero bastante más chico, ubicado al lado del precio de un producto.

Las restricciones al despacho de aceite vienen desde 2008, cuando el Gobierno trató de subirle las retenciones a las exportaciones agropecuarias, provocando una crisis con los productores del sector. Tuvieron sus idas y vueltas, según los productores.

Otros casos recientes de faltantes o topes al consumo se dieron en harina –también durante el conflicto del campo– y yerba mate, que costó conseguir en algunos meses de 2012.

Según las estimaciones de quienes trabajan en consumo masivo, el consumo del mes pasado estuvo “planchado”, es decir a niveles similares o apenas superiores a los del mismo mes de 2012. Varios clientes notaron distintos faltantes, según la cadena. Desde carne envasada al vacío hasta bola de lomo para milanesa, ambos en una cadena que suele tener variedad de cortes vacunos. O ausencias en sachets de leche entera (sólo se la conseguía con hierro, que es más cara) o choclos en lata.

Fuente: http://www.ieco.clarin.com/economia/congelamiento-arranco-faltantes_0_861513880.html