«¿Cuántos serán los que roban? ¿Veinte, treinta? Y bueno, matémoslos a todos y listo». En un nuevo exabrupto que ya lo ha tenido más de una vez como vocero, el intendente de Villa Gobernador
¿Cuántos serán los que roban? ¿Veinte, treinta? Y bueno, matémoslos a todos y listo». En un nuevo exabrupto que ya lo ha tenido más de una vez como vocero, el intendente de Villa Gobernador Gálvez, Pedro González, hizo esta propuesta para terminar con la delincuencia. Y lo hizo, casi como un pedido, frente al mismísimo ministro de Seguridad de la provincia, Raúl Lamberto, que fue a la ciudad a entregar dos motos, un automóvil y una camioneta para la policía local.
El acto tuvo lugar ayer en la plaza San Martín, en la esquina de Opicci e Ingeniero Mosconi, y formó parte de un raíd que hizo el ministro por Rosario, Villa Gobernador Gálvez y Arroyo Seco, donde entregó en total 46 vehículos, entre autos, motos y camionetas.
En la ocasión, el titular de la cartera de Seguridad señaló que el objetivo es «tener una presencia importante en las calles», y exhortó además a los policías a que cuiden los vehículos, porque «la gente no sólo quiere un patrullero, sino quiere verlo en buenas condiciones. Tenemos la obligación de que esto sea así». Por último, Lamberto señaló que «la seguridad es una cuestión de Estado, y el policía, además de estar capacitado y formado, también debe contar con la última tecnología para su trabajo».
Un homicidio. Pero fue González quien pateó el tablero y llamó a «matar a todos los delincuentes». El intendente comenzó su discurso de manera tranquila pero grave. En princpio habló, sin referirse específicamente, del homicidio del que fuera víctima Gladys Baldini de Arribas, una mujer que fue apuñalada en plena calle Jean Jaures, a metros de su casa a mediados de febrero, y que tras una larga agonía falleció el 3 de marzo. Y recordó que a partir de ese suceso se comunicó con las autoridades provinciales para pedir más vehículos policiales. «Hoy el ministro nos trae este regalo (en referencia a los móviles), para que la policía funcione mejor y que tenga más autonomía».
Antes del acto, el intendente mantuvo una reunión privada con Lamberto, a quien planteó (así lo dijo después en público) «las cosas que suceden acá, la problemática que existe. No hace falta que lo diga en público, se lo dije personalmente a él, al jefe de policía de la región y al de la provincia. Le pido encarecidamente que nos ayude, que mande a Drogas Peligrosas cada 15 o 20 días a la ciudad. Nosotros permanentemente pasamos por los lugares donde se vende droga, porque todo el mundo lo sabe», dijo. «Nosotros los acompañamos (a los policías) les decimos «acá, acá y acá venden drogas, para que sea más rápido el trámite, porque el inspector de zona ha hecho las denuncias y todavía no tenemos las respuestas».
«Propolicía». Después de declararse «propolicía», algo que «todos saben que siempre fui», el jefe político de la conflictiva ciudad recordó que en su momento «se compraron móviles para la fuerza. Ahora no lo hacemos porque no tenemos plata, pero somos propolicías y la ayudamos».
Y ya más suelto en su discurso, pidió al ministro «que no deje desbandar a la ciudad, vienen drogadictos de otras partes, vienen tipos a vender la droga empujados de otros lados», reveló, sin especificar tales procedencias. «Todos sabemos quiénes son los que la venden y quiénes no. Todos lo sabemos, por eso les digo a los vecinos que vengan y lo denuncien, que vayan al inspector de zona o que vengan a hablar conmigo. Junto a la población seguramente vamos a zafar de este problema, vamos a tener que encararlo muy fuerte, a todo o nada, y así vamos a sacar la droga de Villa gobernador Gálvez.
Enigmático, habló de algunos sectores (aclarando que no se trata de la policía), que «no sé si buscan mi cabeza o la de toda Villa Gobernador Gálvez, y así se lo expresé al ministro. Como soy de los que no se quedan quietos, y que busco soluciones, hoy le pido al ministro adelante de todos, y también a la policía, que nos den una mano. Necesitamos salir de este despelote que tenemos».
«Matémoslos a todos». Fue entonces que se formuló una pregunta y ofreció una respuesta a modo de solución: «¿Cuántos son los que roban? ¿Veinte tipos, treinta tipos? Bueno, matémoslos a todos y listo, a la miércoles, pero no podemos seguir en la situación en la que estamos, roban a las once de la mañana, a las tres, a las cuatro de la tarde», dijo, y recordó el episodio de Gladys Baldini, a quien «mataron con un Tramontina», exageró. «Después los vecinos me reclaman a mí, y tienen razón. Por eso pido ayuda al ministro y a los vecinos, vamos en contra de la falopa, de los chorros, vamos en contra de todo. Yo sé que esto está en todos lados, pero no me puede estar pasando a mí».
Lamberto, por su parte, no hizo ninguna declaración respecto de los dichos del mandatario local, ni durante el discurso ni en su posterior diálogo con los medios locales. Sí se refirió a la posible incorporación de nuevo personal policial, aunque aclaró que «eso es más complejo y llevará un tiempo. En Villa Gobernador Gálvez nos pidieron vehículos y personal, empezamos con la entrega de vehículos», dijo, aunque advirtió que «se está revirtiendo la relación que había entre cantidad de policías y población».
No obstante, la entrega de móviles y el acto quedaron eclipsados por las palabras de Pedro González, que llamó a «matar» a «los veinte o treinta» que roban, «y a la miércoles».
fuente > http://www.lacapital.com.ar