Si sos de las que venderían la heladera, pero nunca el freezer, entendés el rol esencial que cumple este aparato en el hogar. Sin embargo, ¿conocés los mandamientos para congelar y descongelar alimentos? Volvete una especialista en el arte de cocinar con congelados. Te damos una guía básica.
¿Qué se puede congelar? Casi todo. Algunas excepciones son las comidas enlatadas y los huevos frescos. Ahora bien, hay alimentos que no conviene congelar, simplemente porque pierden calidad. Por ejemplo, la mayonesa, la crema y la lechuga.
¿Cuándo congelar? El estado de los alimentos que congeles dependerá en gran parte de cómo estaban cuando los metiste en el freezer. No esperes hasta que estén a punto de vencer. Si los congelás en su pico de calidad, cuando los descongeles notarás que su sabor es incluso mejor que antes. Por esto, lo conveniente es que congeles las sobras antes de que pasen dos horas como máximo fuera de la heladera. ¡¿Qué estás esperando?!
¿A qué temperatura congelar? Asegurate de que en tu freezer hagan 0° F (-18° C) o menos, para evitar que tu comida se eche a perder, y para conservar su color, sabor, textura y vitaminas (¡congelar los alimentos no destruye sus nutrientes!).
¿Cuánto tiempo? Es “la” pregunta. En general, los alimentos pueden conservarse por tiempo casi indeterminado en el freezer. Sin embargo, hay reglas de “períodos óptimos” para resguardar la calidad y el sabor de los productos. ¿Sabías que la carne de res puede mantenerse de 6 a 9 meses, aproximadamente? Sin embargo, la carne molida, sólo 4 meses, y la carne cocida, entre 2 y 3.
¿Cómo saber si el alimento está en buen estado? Si no encontrás en la guía del punto anterior el alimento que congelaste, hay formas de comprobar vos misma si está en buen estado. Primero, descongelalo; segundo, olelo. Si huele rancio o raro, descartalo. Algunos alimentos pueden no tener muy buen aspecto, pero si se pueden comer, podés usarlos para hacer sopas o guisos.
¿Cómo preservar el color y el sabor de los vegetales? La palabra mágica es “escaldar”. Antes de congelarlos, pasá los vegetales por agua hirviendo o vapor –escasos minutos–, y luego sumergilos en agua helada para cortar la cocción. El escaldado protegerá el color, la textura y el sabor de tus verduras en el freezer.
¿En qué envases congelar la comida? El objetivo de empaquetar la comida antes de congelarla es prevenir que la ataque la humedad. Para vegetales, podés usar bolsas para freezer o de cierre hermético. Otras opciones son: frascos de vidrio, papel de aluminio, papel especial para freezer y bolsas de polietileno. Qué no deberías usar: cartón o envases plásticos reciclados de helado, margarina, queso crema y otros.
¿Cómo descongelar? Nunca descongeles alimentos frescos sobre la mesada, ni debajo de un chorro de agua caliente (malos hábitos muy frecuentes). Las mejores técnicas para descongelar son: en la heladera, debajo de agua fría o en el microondas. ¡Recordá que es importante cocinar las carnes, aves y pescados inmediatamente después de descongelarlos!
¿Se puede cocinar sin descongelar? ¡Sí! A veces no hay tiempo de esperar a que un alimento se descongele, ¡porque los comensales están hambrientos! El único problema es que la cocción demorará al menos un 50% más de tiempo que lo normal.
¿Es seguro volver a congelar? Si descongelaste alimentos crudos en la heladera y te arrepentiste, podés volver a congelarlos sin problema, aunque no los hayas cocinado. Puede que sacrifiques calidad en el proceso. También podés recongelar alimentos cocidos. Una única advertencia: no vuelvas a congelar alimentos que hayan permanecido afuera de la heladera dos horas o más, o que hayan estado expuestos una hora a una temperatura ambiente de 90° F (32° C).