La Comisión Interna de la TV Pública rechazó lo que denominó la «demonización de Juan Miceli», tras las repercusiones que se desataron luego de que el periodista, en el noticiero del canal estatal, le preguntara al diputado Andrés «Cuervo» Larroque por qué La Cámpora entregaba donaciones anónimas con pecheras que los identificaban.
La comisión de la TV Pública, canal en el que se desempeña Miceli, consideró que hubo una «campaña» que tuvo «centro en el programa 678 y que se ha extendido por una importante cantidad de medios».
«El pluralismo de la TV Pública no le debe nada a las autoridades de la empresa, sino a una historia de lucha en defensa de la democratización de la información que no empezó en 2003, sino mucho antes», dijeron en alusión a la gestión kirchnerista.
«La irritación que provoca la pregunta de Miceli se explica con facilidad: preguntar sin condicionamientos no forma parte de la idea de periodismo y libertad de expresión que le agradaría al diputado Larroque», manifestaron en un comunicado César Nenna, Agustín Lecchi, Norberto González, Jorge Rodríguez, integrantes de la Comisión Interna del canal estatal.
Luego de la pregunta de Miceli, desde 678 y otros medios cercanos al Gobierno habían calificado al periodista como «vocero de la derecha», «periodista del establishment», y «corporativo».
«Estas calificaciones son las que generan las condiciones para someter a escarnio a un periodista que trabaja hace tres años como una de las caras mas conocidas del noticiero de la TV Pública, y no tiene ninguna vinculación actual con el Grupo Clarín», manifestaron ayer los colegas de Miceli.
«Narración conspirativa»
En tanto, resaltaron que en 678 hubo una edición para no perjudicar la imagen de Larroque en el episodio. «La reacción de Larroque, que increpó a Miceli preguntándole su nombre al aire, es un claro intento de intimidación, y en la que demuestra desconocer que este es un canal público y no gubernamental. Esta pregunta fue convenientemente editada y eliminada en la versión de los hechos presentada por los programas producidos por Diego Gvirtz, en un acto de manipulación», manifestaron.
Y continuaron: «La etapa siguiente del escarnio es instalar la idea de que la pregunta de Miceli a Larroque fue el detonante de los incidentes entre militantes oficialistas y supuestos integrantes de la Uocra». Así aludieron al tratamiento informativo que tuvo el enfrentamiento entre militantes de La Cámpora y miembros de la Uocra, por el que fue detenido el hijo del hombre fuerte del gremio, Juan «El Pata» Medina.
La comisión de la TV Pública aseguró: «Fue una narración conspirativa planteada explícitamente por el diputado Juan Cabandié y difundida por nuestro noticiero. Es necesario aclarar que eso nada tiene que ver con la opinión de los periodistas trabajadores de prensa de Canal 7».
Libertad de expresión
En su carta, los trabajadores del canal reflexionaron: «Sería bueno preguntarse qué clase de política de medios y de comunicación tienen aquellos que califican de antipolítica a las preguntas incómodas, acertadas o no, pero de cualquier manera legítimas para los trabajadores de prensa».
«En ese sentido, reivindicamos el absoluto e incuestionable derecho de los periodistas de la TV Pública, y de todos los demás medios, a ejercer su profesión libremente y sin condicionamientos de ninguna índole, lo que incluye los del poder político de turno», concluyeron