Por Alan Duke
LOS ANGELES (CNN) — Prince Jackson, quien usaba una máscara en público cuando era niño, comparecerá este miércoles ante un tribunal para dar su testimonio sobre los últimos días de su padre.
El hijo mayor de Michael Jackson tenía 12 años cuando el icono del pop murió. Pero su padre le contaba en quien confiaba y en quien no, y acerca de sus temores mientras se preparaba para sus conciertos en su gira de regreso.
Prince, Paris y Blanket Jackson y su abuela Katherine Jackson demandan a AEG Live y acusan a la última promotora de conciertos de su padre de contratar, retener o supervisar negligentemente al médicoConrad Murray, quien fue sentenciado por homicidio involuntario en la muerte de Jackson.
Los abogados de Jackson afirman que la promotora y productora de los espectáculos This Is It presionaron a Murray para hacer que Jackson estuviera en los ensayos y no lo ayudaron a pesar de numerosas advertencias de que estaba en problemas de salud.
Murray dijo a la policía que utilizó el anestésico quirúrgico propofol casi cada noche durante dos meses para tratar el insomnio de Jackson. El forense dictaminó que una sobredosis de propofol lo mató.
Los abogados de AEG Live afirman que Jackson escogió y supervisó a Murray y que sus ejecutivos no tenían forma de saber que el médico utilizaba el peligroso tratamiento.
«Pequeño hombre del papá»
El abogado Brian Panish comenzará el examen directo del Prince este miércoles por la mañana y se espera que el abogado de AEG Live, Marvin Putnam, continúe con el interrogatorio más tarde.
Es posible que los miembros del jurado también escuchen a Paris Jackson, desde Putman y a través de clips de video, para evitar contradicciones entre hermano y hermana.
Paris, quien tenía 11 años cuando su padre murió, no está disponible para testificar en vivo en la corte desde que se encuentra hospitalizada, ya que recibe tratamiento psiquiátrico tras un intento de suicidio a principios de este mes.
AEG Live trató de obligar al hermano más pequeño —Blanket, de 11 años— a declarar, pero el juez rechazó su petición después de que un psicólogo dijo que sería perjudicial para él.
Michael Jackson confió en su hijo mayor sobre sus negocios a una edad temprana.
«Prince siempre ha sido, incluso a los 12, el pequeño hombre, el hombre pequeño de papá», declaró el cocinero de los Jackson, Kai Chase. «Él quería que su padre estuviera muy orgulloso de él”.
«El peso del mundo está sobre sus hombros, él es el mayor y la figura paternal para sus hermanos», declaró Chase. «Es mucho para él, comienzan a gustarle las chicas. Él desea que su padre estuviera allí para darle consejos. Es devastador para él».
Prince comenzó recientemente a perseguir una carrera en el entretenimiento, trabajando varios días como un «enviado especial» para «Entertainment Tonight» y actuó en un episodio de la serie de televisión «90210».
El deterioro de dos meses de la salud de Jackson
Se le pedirá que describa cómo fue cambiando la salud de su padre a partir de abril de 2009, justo antes de que el doctor Murray comenzara sus visitas nocturnas a su mansión de alquiler en Los Ángeles, hasta su muerte el 25 de junio de 2009.
Un correo electrónico en la evidencia y testigos anteriores han informado de un deterioro físico y mental de Jackson, durante dos meses.
El director Kenny Ortega y el director de producción John BugzeeHougdahl advirtieron a los ejecutivos de AEG sobre el deterioro de Jackson a través de una serie de correos electrónicos en las últimas dos semanas de vida de Jackson, incluyendo indicaciones de que era incapaz de hacer algunos de sus bailes característicos o que le costaba trabajo recordar letras de canciones que había cantado por décadas.
Su maquillista y coreógrafo testificaron acerca de la paranoia de Jackson, ellos aseguraron que hablaba solo y decía que escuchaba voces, y perdió peso severamente.
La productora asociada de espectáculos Alif Sankey testificó que ella «tenía un sentimiento muy fuerte de que Michael se estaba muriendo», después de un ensayo 11 días antes de su muerte.
«Yo estaba gritando en el teléfono en ese momento», declaró Sankey. «Le dije que tenía que ir al hospital».
Un experto en sueño de la Universidad de Harvard declaró la semana pasada que la tendencia a la baja de Jackson hacia que su muerte se podría explicar por los efectos insidiosos de infusiones crónicas de propofol. Los tratamientos nocturnos probablemente interrumpieron el ciclo de sueño de Jackson, robándole el movimiento ocular rápido (REM por sus siglas en inglés) y el sueño, que son vitales para mantener vivos al cerebro y al cuerpo.
«Los síntomas que el señor Jackson estaba mostrando fueron consistentes con lo que alguien podría esperar ver de alguien que sufre de la privación total de sueño durante un período crónico», dijo el doctor Charles Czeisler, un médico experto en sueño de Harvard.
El juicio se encuentra en su novena semana y se espera que dure hasta agosto.