Kevin Shalin, un crítico gastronómico británico, se encuentra en coma luego de comer 413 galletas de manteca, altas en calorías, en un restaurante de Arkansas, Estados Unidos.
Shalin intentaba superar el récord de galletas comidas en el restaurante Red Lobster, pero no lo consiguió y, lo que es peor, puso en peligro su vida.
El hombre comenzó a sentirse mareado después de comer la galleta 412 y sus amigos le pidieron que parase.
Pero continuó argumentando que: “era la cosa más maravillosa que jamás se puso en la boca”.
Inmediatamente se desmayó a causa de las 62 mil calorías que ingirió. Rápidamente, fue trasladado a un hospital de Little Rock, donde los médicos drenaron la enorme cantidad de mantequilla presente en su cuerpo.
Según los doctores: “ésta habría bloqueado las señales procedentes de su cerebro, por lo que cayó en un coma inducido”.