Una insólita mansión fue construida en la azotea de un rascacielos en Pekín, lo que ha provocado la ira de los vecinos del edificio de 26 pisos.
La casa de dos plantas se encuentra situada entre una montaña de rocas falsas, árboles y hierba y cubre toda la superficie superior de la construcción, según informa el diario ‘South Morning China Post’.
La construcción ilegal se encuentra en un complejo residencial llamado Park View, situado en el distrito de Haidian de la capital china, un área destinada a instituciones gubernamentales y universidades.
Los vecinos aseguran que el dueño, al que se refieren como Profesor Zhang, tardó seis años en levantar la espectacular construcción y aseguran que el ruido de la maquinaria pesada es constante y que en ocasiones se producen goteras.
El vecindario se muestra preocupado por los daños estructurales que pueda causar la estrafalaria montaña de piedra, que han denunciado en numerosas ocasiones a los funcionarios de la gestión urbana local y a la policía.