Según informó el canal C5N, los peritos encontraron un cabello del portero Jorge Mangeri en la soga con que fueron anudadas las piernas del cuerpo de Ángeles Rawson.
El cadáver de la adolescente apareció al día siguiente de su desaparición en el predio del CEAMSE de José León Suárez. Días después, Mangeri confesaría. Sin embargo, a la hora de ordenar su procesamiento, la clave no fue esa autoincriminación, sino el resultado de las pericias de ADN que determinaron que bajo las uñas de Ángeles había rastros genéticos de Mangeri. El pelo en la soga sería una nueva prueba en su contra.
También se conoció hoy el informe de una junta médica que pidió el juez de instrucción Javier Ríos para determinar las causas de la muerte de Ángeles. Según C5N, determinó que “sufrió una prolongada agonía” y murió por compresión en el camión de basura. No obstante, hubo un dictamen en disidencia del perito de la querella, que afirmó que Ángeles falleció por asfixia.
Aún restan conocerse los resultados de otras pericias de ADN pendientes. Se trata de los informes que sufrieron una nueva postergación, vinculados con rastros humanos hallados en el departamento del portero Jorge Mangeri, su automóvil, el sótano del edificio de Ravignani 2360, un vehículo de la familia de la víctima y en anillos extraídos de sus manos.
Por otra parte, el abogado Miguel Ángel Pierri ratificó hoy que continuará a cargo de la defensa del portero. Aseguró que la decisión obedece a que «no hay ninguna causa» contra su perito de parte Gabriel Boselli, involucrado en una polémica por supuesta contaminación de muestras genéticas en el departamento del acusado.
Fuente > infobae.com