La Justicia chilena condenó este lunes a cadena perpetua a Patricio Ahumada, autor del crimen del joven gay Daniel Zamudio, y a penas de entre siete y 15 años a otros tres implicados en el asesinato tras una brutal golpiza. «Se condena al acusado Patricio Ahumada (…) en calidad de autor de delito calificado de Daniel Zamudio a la pena de presidio perpetuo», dijo la sentencia del Cuarto tribunal oral en lo penal de Santiago. El 17 de octubre pasado el tribunal había declarado culpables a los cuatro condenados tras establecer su responsabilidad en el brutal ataque a Zamudio por su condición de homosexual en un parque del centro de Santiago en marzo de 2012, según estableció la investigación judicial. Ahumada, que al cabo de 20 años podrá pedir beneficios carcelarios, es sindicado como el líder del grupo que golpeó hasta causarle la muerte a Zamudio. Otros tres miembros del grupo –Alejandro Angulo, Raúl López y Fabián Mora– fueron condenados a entre siete y 15 años de prisión. El fallo fue celebrado por el presidente chileno, Sebastián Piñera, quien repudió «el odio, la discriminación y la crueldad» que mostraron los asesinos de Zamudio. «Ese asesinato no podía quedar impune ni tampoco ser en vano», agregó Piñera. «Es una pena ejemplar, se van a pudrir en la cárcel», comentó, por su parte, Iván Zamudio, padre de la víctima, tras conocer la decisión judicial. La defensa de los condenados cuenta con 10 días para apelar la sentencia. «Los jueces están comprados, están condenando a un inocente», alegó por su parte el principal inculpado al finalizar la audiencia. El fallo fue entregado el mismo día en que se conoció públicamente otro hecho de violencia por discriminación en contra de Wladimir Sepúlveda, un gay de 24 años que fue atacado por su condición sexual por cuatro hombres y dos mujeres en la localidad de San Franciso de Mostazal, en el centro de Chile, según informó el Movimiento de integración y Liberación Homosexual (Movilh). Tras el ataque, ocurrido la noche del 20 de octubre, Sepúlveda fue trasladado a un hospital de la ciudad de Rancagua donde se encuentra «en coma y estado crítico», según el último parte médico. El presidente Piñera anunció una demanda en contra de los responsables del hecho. Según la investigación sobre el caso de Zamudio, se estableció que el grupo actuó con extrema violencia y ensañamiento sobre el gay: «Le provocaron cortes en la oreja izquierda y el rostro, dibujaron esvásticas en su tórax, abdomen. Con una piedra fracturaron su pierna con fuerza inusitada y con cigarros encendidos quemaron la piel de la víctima sin que este pudiera defenderse». El tribunal no pudo establecer, sin embargo, que los atacantes fueran parte de un grupo neonazi pese a que dibujaron esvásticas en su cuerpo. Zamudio, de 24 años, murió tras tres semanas de agonía en un hospital de Santiago, a causa de un traumatismo craneoncefálico, en medio de la conmoción de la población chilena por el feroz ataque del que había sido víctima. La decisión judicial pone fin a un caso que provocó también repudió en el exterior. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) pidió una investigación para esclarecer la muerte de Zamudio. El caso urgió al Congreso a acelerar el trámite legislativo de una ley antidiscriminación, promulgada como ‘Ley Zamudio, estancada en el Congreso desde 2005 y que sanciona con multas que van de los 400 a los 4.000 dólares la «discriminación arbitraria» de raza, religión u orientación sexual, y aumenta las penas para delitos motivados por la discriminación.
Cadena perpetua para el asesino del gay chileno Daniel Zamudio
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