Veda electoral: qué se puede hacer y qué no

Desde las 8 están prohibidos los actos políticos y partidarios de cara a los comicios del domingo, que definirá quiénes ocuparán 24 bancas de senadores y 127 de diputados nacionales que se ponen en juego

Crédito: Télam
A las 8 de este viernes empezó la veda electoral en todo el país. La misma estará vigente hasta el domingo a las 21, cuando el ministro del Interior, Florencio Randazzo, anuncie los primeros datos oficiales sobre el escrutinio. Atrás quedó una campaña que englobó varios hechos de violencia y que no tuvo en escena a la presidente Cristina Kirchner, en reposo tras una operación por un hematoma en la cabeza.

Hasta el cierre del acto electoral se prohíbe: realizar actos públicos de proselitismo; la emisión y publicación de avisos publicitarios en medios televisivos, radiales y gráficos con el fin de promover la captación del voto del elector (no están incluidas las redes sociales ya que no existe organismo que las regule); y la publicación en medios de comunicación (sean estos audiovisuales, de radiodifusión, gráficos, internet u otros) de resultados de encuestas, sondeos de opinión, pronósticos electorales, así como la referencia a sus datos. Todas las notas de Infobae relacionadas con las elecciones fueron publicadas antes de las 8.

Además, doce horas antes y tres horas después de finalizado el acto electoral se prohíbe: la portación de armas, el uso de banderas, divisas u otros distintivos; y tener abiertas las casas destinadas al expendio de cualquier clase de bebidas alcohólicas, incluyendo bares, pubs, boliches.

En tanto, durante las elecciones del domingo y hasta tres horas después del cierre de los comicios están prohibidos los espectáculos populares al aire libre; los espectáculos populares en recintos cerrados; las fiestas teatrales y deportivas; toda clase de reunión pública que no se refiera al acto electoral; y publicar o difundir encuestas y proyecciones sobre el resultado de la elección.

Asimismo, a 80 metros de la mesa receptora de votos está inhabilitado: la realización de reuniones de electores en los domicilios; la utilización de las viviendas como depósito de armas; la apertura de organismos partidarios y la distribución de boletas de sufragios a los electores.

El Ministerio de Defensa informó que el total de efectivos a utilizarse para estar presentes en las próximas elecciones es de 91.671, entre personal de las Fuerzas Armadas, las fuerzas de Seguridad y la Policía Provincial. Estos efectivos se distribuirán entre los 24 distritos electorales, donde habrá 13.209 locales de votación y se tendrán que custodiar un total de 90.696 mesas y urnas.

Sumado a esta cantidad de efectivos, también estarán a disposición 5.000 vehículos terrestres, ocho helicópteros, dos aviones y siete embarcaciones. Para un mayor control, se utilizarán equipos de comunicaciones e informática del Ejército.

Por supuesto, algunos lugares son de acceso más complicado que otros. Pero esto no quita que deban ser custodiados de igual forma. Por lo tanto, en ciertos lugares del país se utilizarán 80 mulas del Ejército y Gendarmería, ya que son el único medio de transporte que puede llegar a estos lugares inhóspitos.

Asimismo, no solo se tienen en cuenta estos lugares recónditos y de difícil llegada en varios puntos del país. Dentro del operativo, también está contemplada la seguridad necesaria para el sufragio en 243 unidades penitenciarias del país.

Para llevar a cabo todo de la mejor manera, habrá tres puestos de comandos: uno en el edificio «Libertador»,sede el Ministerio de Defensa, del Ejército y del Estado Mayor Conjunto de las FFAA; otro alternativo en la guarnición militar de Campo de Mayo, y el tercero, denominado «táctico», que será a través de un vehículo.

Cabe aclarar que toda la misión de preservar y asegurar el orden durante las elecciones es responsabilidad del Comando General Electoral, creado por decreto presidencial. Este ente debe coordinar las Fuerzas Armadas y las de Seguridad; debe ejecutar las medidas de seguridad dando vigilancia en los locales de votación, y custodiar las urnas y los centros de cómputos y juntas electorales.