James Holmes le preguntó a un guardia: «¿Viste la película?«. Revelaron que había advertido el ataque.
El joven acusado de matar a una docena de personas durante la exhibición en la última película de Batman en la localidad estadounidense de Denver, Colorado, preguntó sobre cómo termina el film, «The Dark Knight Rises», aseguró un funcionario de la cárcel citado por el New York Daily News.
James Holmes, de 24 años, «estaba tratando de parecer sinceramente curioso», dijo una persona que presenció el extraño incidente el martes en la enfermería de la cárcel del Condado de Arapahoe, donde el joven está detenido en confinamiento solitario.
«Como si no tuviera idea de que hubiera algo malo en lo que estaba diciendo. Fue morboso… Yo creo que está esforzándose en actuar como un loco», afirmó la fuente.
Con ojos vidriosos y voz inexpresiva, Holmes le preguntó a un funcionario de la cárcel «¿Viste la película?» y luego, «¿Cómo termina?«. Holmes repitió la pregunta cuando el trabajador no le hizo caso. «Si me hubiera dicho eso a mí, me habría resultado muy difícil no pegarle», dijo al diario el testigo no identificado.
El miércoles también se supo que Holmes habría enviado un cuaderno «lleno de detalles sobre cómo iba a matar a la gente» a un psiquiatra de la Universidad de Colorado antes del ataque, pero el paquete sin abrir permaneció en una oficina de correo. El cuaderno de espiral fue descubierto el lunes después de que el psiquiatra recibiera finalmente el paquete, informó FoxNews.com.
«Había dibujos de lo que iba a hacer, dibujos e ilustraciones de la masacre», dijo una fuente policial no identificada. Entre los bosquejos, había esquemáticos dibujos de seres humanos con armas de fuego disparándole a otras personas. No está claro cuánto tiempo estuvo el paquete en la oficina de correo, y por qué no se entregó o descubrió antes de la masacre del viernes.
Holmes, acusado de matar a tiros a 12 personas y de herir a otras 58 en un cine de Aurora, en las afueras de Denver, está preso en la Cárcel del Condado de Arapahoe. Fue trasladado a la enfermería por su propia protección el martes, informó el Daily News, donde le pusieron un protector de plástico negro para el rostro para que dejara de escupir a los guardias. También lleva grilletes en los tobillos y un chaleco antibalas.
El joven, que había abandonado sus estudios de posgrado en la Universidad de Colorado, parecía aturdido y desorientado en su primera comparecencia judicial el lunes. Podría ser sentenciado a la pena de muerte, a no ser que se demuestre que es mentalmente incompetente.
Fuente: http://www.perfil.com