Luego del papelón que protagonizó el ministro de Economía, Hernán Lorenzino, al escaparse de una entrevista con la TV griega cuando le preguntaron sobre la inflación, el ministro recibió un fuerte respaldo por parte de Cristina Fernández de Kirchner, que al presentar un nuevo plan de financiamiento de obra pública bromeó sobre el episodio: «Ven, no se quiere ir».
En el salón de Mujeres de la Casa de Gobierno, Cristina y Lorenzino firmaron autorizaciones para el financiamiento de obras en varias provincias y municipios, en lo que fue el primer gesto de respaldo por parte de la mandataria, seis días después de que se conociera la fallida entrevista del ministro.
«Ven, no se quiere ir», bromeó Cristina, en referencia a la fatídica frase de Lorenzino que festejó el contundente respaldo presidencial y hasta se permitió agradecer con la mano en alto a los asistentes al acto los aplausos con que recibieron la broma presidencial, informó la agencia DyN.
El programa de financiamiento podría significar el envío de dinero para la gestión del gobernador bonaerense Daniel Scioli y representa el primer respaldo público de la mandataria seis días después de que se difunda la entrevista que Lorenzino interrumpió alegando que «en Argentina es muy complejo hablar de estadísticas».
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