El presidente de Independiente, Javier Cantero, admitió que «después de la muerte» de sus «padres», afronta «el momento más triste» de su «vida». «Tenemos que dar la cara y decir cómo vamos a seguir, a los socios y a los hinchas. Después de la muerte de mis padres, es el momento más triste de mi vida», reconoció el máximo dirigente de Independiente, uno de los clubes grandes de la Argentina, pero que se halla por primera vez en su historia a un paso del descenso de categoría. La máxima autoridad de los Rojos habló así tras la caída de su equipo por 1-0 ante Arsenal, en el Estadio Del Bicentenario de Catamarca, la que determinó una nueva frustración para los de Avellaneda, dado que quedaron eliminados de la Copa Argentina en los octavos de final. Ya con el crucial partido del sábado a la vista, como anfitrión de San Lorenzo de Almagro, Cantero acompañó hasta Catamarca al conjunto alternativo de Independiente que asumió el compromiso por la Copa Argentina. Ese encuentro ante el Ciclón es trascendente para los Diablos Rojos, porque es muy grande el riesgo de matemáticamente perder la categoría, debido a que los de Miguel Brindisi sólo les sirve ganar y, aún así, dependerán de resultados ajenos. «Tenemos un partido complicadísimo ante San Lorenzo y no dependemos de nosotros», asumió Cantero. «Nadie festeja los logros económicos, que recuperamos un club copado por ellos (los barrabravas). Se festeja lo deportivo y ahí nos fue mal», argumentó el dirigente al sintetizar el balance de su gestión.
Javier Cantero: «Es el momento más triste de mi vida»
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