José Arce : «Estoy cuerdo», al reanudarse el juicio por el crimen de Rosana Galliano

José Arce, acusado del crimen de su esposa Rosana Galliano, cometido en 2008 en el partido bonaerense de Exaltación de la Cruz, dijo hoy que está «cuerdo» y «recuperado», luego de haber sufrido un ACV que había motivado la suspensión del debate. «Me estoy recuperando. Recuperé el habla, recuperé el caminar, tengo un poquito cruzada la vista», indicó el imputado a la prensa al finalizar esta tarde una nueva audiencia ante el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 1, al reanudarse el juicio tras casi cuatro meses de suspensión. Arce (64), vestido con un pantalón claro y camisa blanca y que se lo vio utilizar una especie de tubo de PVC color verde como bastón para movilizarse, contó que está «muy contento» porque volvió a caminar y dijo que al principio de su recuperación «no podía hablar». «Mi cerebro está bien. Estoy cuerdo. Mis hijos están bien (…) Estoy contento. Las cosas van bien», expresó. Consultado de si va a declarar, su abogado Alfredo García Kalb dijo que todavía no decidieron si lo va a hacer porque primero quieren «compulsar el expediente». En tanto, durante la audiencia de sólo declaró un vigilador del Hospital de Pilar que estuvo en ese lugar con el viudo la noche del crimen de Rosana, cuando Arce llevó a sus hijos para que recibieran asistencia médica. Este testigo relató que en un determinado momento Arce salió de uno de los consultorios para «hablar por teléfono». «Paso por al lado de él y él me llama y dice que estaban asaltando a la mujer. Ahí como que se siente descompensado, me dice que se siente mal y lo acompaño al cuartito que tenemos nosotros en seguridad, a metros del consultorio de pediatría», recordó. Luego, agregó que Arce le pidió «que llame a la policía. Así que llamo al 911 y me dicen que llame al comando de Exaltación de la Cruz. El señor Arce me da los datos de la dirección del lugar donde fue la circunstancia y eso es lo que yo le paso a la Policía». En tanto, los padres y los hermanos de Rosana presenciaron la audiencia y reiteraron su convencimiento de que Arce y los demás imputados son culpables y en que serán condenados. En el banquillos de los acusados también se encuentran la madre de Arce, Elsa Aguilar (83), acusada como su hijo de ser instigadores del homicidio; el supuesto autor de los disparos, Gabriel Leguizamón (41), y su hermano, Paulo Leguizamón (35). Hasta el momento, sólo declararon unos 40 testigos de los 200 que fueron citados aunque se espera que las partes desistan de la mayoría para pasar a las indagatorias de los acusados. El debate comenzó en abril pasado y en plena audiencia del 17 de mayo Arce sufrió un accidente cerebro-vascular por lo que debió ser internado y recibir tratamiento médico, lo que motivó en la suspensión del proceso. El crimen de Rosana (29) fue cometido la noche del 16 de enero de 2008, en su casaquinta del barrio El Remanso, en Exaltación de la Cruz, cuando la víctima cenaba con su hermana Mónica. Rosana recibió a las 22.50 un llamado de Arce a su teléfono celular y, por tener poca señal, se vio obligada a salir de la casa, donde la ejecutaron de cuatro balazos con una pistola. Desde el inicio de la causa, el entonces fiscal Marcelo Pernici (ya fallecido) consideró que se trató de un crimen por encargo de Arce, con quien la víctima atravesaba un conflictivo proceso de divorcio, financiado por su madre y ejecutado por los Leguizamón. Una de las declaraciones que más valoró el fiscal fue la de una testigo que también declaró en el juicio, quien dijo que días antes del crimen de Rosana escuchó a Gabriel Leguizamón pedir un arma a través de un teléfono, luego lo vio reunido con Arce y su madre y al término del encuentro el viudo afirmó: «Ya está todo arreglado». Arce fue detenido el 21 abril de 2009, cuando fue imputado como autor intelectual del «homicidio calificado por el vínculo» de su esposa, aunque luego fue excarcelado y afronta el juicio en libertad.