El coronel Yayan Sofiyan, comandante del buque de guerra Bung Tomo, dijo a la televisora MetroTV que cinco de los cuerpos rescatados aún estaban fijos a sus asientos, lo que alimenta nuevas teorías de qué pudo pasar con el vuelo de AirAsia que se estrelló el domingo en el mar de Java. Por su parte, el director de los equipos de búsqueda de Indonesia, Henry Bambang Soelistyo, comunicó que de los 30 cuerpos recuperados hasta ahora del vuelo 8501, 21 fueron encontrados este viernes, muchos de ellos por un buque de la Armada.
Los equipos de rescate esperan que muchas de las personas que iban en el avión sigan dentro del fuselaje, que aún no fue localizado. Sin embargo, cinco de esos cadáveres fueron hallados flotando amarrados aún a su asiento, que se desprendió de la aeronave. Los expertos estiman que el Airbus está a una profundidad de entre 25 y 30 metros.
Un helicóptero del buque Sampson de la Armada de EEUU llevó cinco cadáveres a Pangkalan Bun, la localidad más próxima a la zona de búsqueda, donde fueron descargados y transportados en ambulancias.
Además, según informó la BBC, el avión de AirAsia no tenía licencia para volar el día de la tragedia. La cadena de noticias británica logró de primerísimas fuentes la información que corrobora que sólo tenía permiso para operar otros cuatro días de la semana.
Bambang Soelistyo añadió que barcos de Indonesia, Malasia, Singapur y Estados Unidos estaban en la zona desde antes del amanecer del viernes para intentar localizar restos y las importantes cajas negras del avión.
En tanto, el investigador de seguridad aérea indonesio Toos Saniotoso dijo que el mal tiempo, que ha dificultado la búsqueda en los últimos días, sigue siendo una preocupación. Los pronósticos hasta el domingo son de lluvia, vientos fuertes y olas de hasta cuatro metros. Las fuertes corrientes marinas mantienen los restos en movimiento.
A casi una semana de la caída del avión, sólo los restos de una de las víctimas del accidente fueron devueltos a su familia, el jueves.
El Airbus A320 transportaba a 162 pasajeros y tripulantes cuando se estrelló el domingo pasado, mientras estaba a medio camino de su vuelo de dos horas entre Surabaya y Singapur.
Minutos antes de perder contacto, el piloto dijo al control de tráfico aéreo que se estaba aproximando a nubes de tormenta, pero la torre le negó el permiso para subir a una altitud mayor a causa del alto tráfico aéreo. Aún sigue siendo un misterio qué provocó que la aeronave cayera al mar
Los restos del avión serán claves para explicar qué pudo provocar el accidente del vuelo 8501. La grabadora de datos contiene información crucial como la temperatura del motor, la velocidad vertical y horizontal y cientos de mediciones más. Además, contiene las conversaciones entre los pilotos y otros sonidos procedentes de la cabina.