Estado Islámico se adjudicó el atentado contra un vuelo de la compañía MetroJet en el que murieron 224 personas, a pesar de que los gobiernos de Moscú y El Cairo lo niegan.
El grupo terrorista Wilayat Sina, afiliado al Estado Islámico, se adjudicó la explosión de un avión de la compañía rusa MetroJet ocurrida este sábado en pleno vuelo por la península del Sinaí, en Egipto, y desde el EI difundieron un video de la caída de la aeronave.
La grabación fue difundida por la agencia de noticias árabe Aamaq, pero no despeja dudas sobre si el avión fue derribado desde la tierra o si explotó por una bomba en su interior.
Mientras tanto, el primer ministro de Egipto, Sherif Ismail, desmintió en una conferencia de prensa que el Estado Islámico haya estado involucrado en la caída del vuelo A321 de MetroJet.
«Expertos aseguraron que técnicamente no se puede derribar un avión que vuela a esa altura, y es la caja negra la que determinará la causa», declaró el mandatario.
Por su parte, el ministro de Transporte ruso, Maxim Sokolov, aseguró que «no puede considerarse verídica» la información de que el avión que transportaba 224 pasajeros desde Sharm el Sheij a San Petersburgo fuera alcanzado por un misil lanzado por terroristas.