Feria Judicial: Las causas como la de López y Báez seguirán activas por tener detenidos

Pese a no tener presos también continuarán con medidas de prueba ya en curso aquellas en las que está imputada la ex presidenta Cristina Kirchner y sus hijos Máximo y Florencia como las causas Hotesur y Los Sauces. Pero ante la eventual necesidad de disponer alguna medida urgente los jueces a cargo, Julián Ercolini y Claudio Bonadio respectivamente, tendrían que habilitar formalmente la feria judicial. En el caso del detenido López, el juez federal Daniel Rafecas ya tomó esa medida y «habilitó» el receso de invierno: esto le permitirá seguir ordenando medidas y produciendo prueba antes de las indagatorias de la religiosa Celia Aparicio, de la esposa del ex funcionario María Amalia Díaz, del contador Andrés Galera y del empresario de la construcción, Eduardo Gutiérrez, que iniciarán a partir del 1 de agosto próximo. Además, la defensa de López podría apelar ante la Cámara Federal su procesamiento con prisión preventiva por enriquecimiento ilícito luego de ser detenido el 14 de junio cuando intentaba esconder bolsos con casi 9 millones de dólares en el interior de un monasterio de la localidad bonaerense de General Rodríguez. El recurso podrá ser presentado en la feria ante la sala del Tribunal de Apelaciones que esté de turno. Este año, de manera inusual y ante la gravedad de las causas que manejan, muchos jueces federales que optaban por vacacionar las dos semanas de feria de invierno, resolvieron quedarse o bien hacer uso de pocos días de licencia, entre ellos el juez federal Julián Ercolini, a cargo de la causa Hotesur. Si bien no hay detenidos, las medidas de prueba ordenadas siguen su curso y medidas dictadas por el juez, como el embargo de los 4.600.000 dólares de la caja de seguridad de Florencia Kirchner y del saldo de sus cuentas bancarias podría ser apelada. Si esto ocurriese, habría que resolver si el tema justifica habilitar la feria o debe esperarse el final del receso para darle curso. Por su parte, el juez federal Sebastián Casanello impuso esta semana el secreto de sumario por diez días en la causa que tiene detenido al empresario Lázaro Báez, a su contador Daniel Pérez Gadín y al abogado Jorge Chueco por lavado de activos. Lo hizo a raíz de una denuncia que dio cuenta de supuestos movimientos financieros por parte de dos hijos de Báez, Martín y Luciana, para sortear inhibiciones y embargos ordenados sobre los bienes de la familia. En la causa se ordenaron casi 20 allanamientos en todo el país y la prueba comenzó a llegar al filo del inicio de la feria judicial al despacho del juez en el cuarto piso de Comodoro Py 2002, donde comenzará a ser analizada. Además los tres detenidos del caso podrían insistir con recursos para lograr su excarcelación ante los tribunales de apelación, como la Cámara Federal de Casación, durante el receso invernal. La Cámara Federal confirmó los procesamientos con prisión preventiva en las últimas semanas y abrió el camino para cuestionar esta decisión ante Casación, el tribunal superior: al haber presos la feria no interrumple los plazos legales. Por su parte, el juzgado federal de Sergio Torres estará de turno durante el receso por lo cual recibirá nuevas denuncias que involucren detenciones o precisen medidas de prueba que por su premura, ameriten habilitar la feria. Para después de la feria judicial, se espera que por ejemplo la sala II avance sobre las apelaciones presentadas contra los procesamientos por la causa de la venta de dólar futuro al final del kirchnerismo, entre ellos el de la ex presidenta Cristina Kirchner. El jueves último esta sala quedó confirmada en ese caso al frustrarse un pedido para apartarla hecho por la defensa de la ex mandataria y comenzará así a revisar los procesamientos dictados por el juez federal Claudio Bonadio. Y para la primera semana de agosto también se esperará en Comodoro Py a la presidenta de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini y al ex ministro de Planificación kirchnerista Julio De Vido, para ser indagados en la causa por defraudación e