«Siento asco y miedo. Este hombre sigue entrenando a chicos», contó la joven que forma parte de la selección argentina sub 20. Contó que una chica a la que le pasó lo mismo lo denunció pero «nadie le creyó».
La jugadora de fútbol y futsal Ludmila Martínez denunció que fue abusada en 2009 por un entrenador cuando tenía 9 años y remarcó hoy que esa persona «sigue trabajando» en la misma entidad. Martínez, quien hoy juega futsal en River y la convocaron a la Selección sub 20, además de también jugar al fútbol en Platense, relató que su agresor sexual fue Eduardo Michelli, técnico de ella cuando jugaba en el Club Social y Deportivo Los Andes de la localidad de Florida, en el partido bonaerense de Vicente López. Ludmila contó su situación en una serie de videos que subió a su cuenta de Instagram y al mismo tiempo radicó la denuncia en la Fiscalía Especializada en Violencia de Género de Vicente López. Ver esta publicación en Instagram Después de nueve años de quedarme callada pude contar lo que Eduardo Michelli me hizo. Cómo abuso de mi cuando yo tenia apenas 9 años. Hoy lo puedo hacer público gracias a todas las chicas que se animaron a hablar. Sin ellas yo no hubiera podido hacerlo. No estamos solas. No nos callamos más✊ Una publicación compartida de @ ludmimartinezz el 13 Dic, 2018 a las 9:01 PST «Nos ofrecía chupetines como premio. Me llevaba a su oficina, cerraba la puerta y abusaba de mi. Sé que hay más chicas a las que les pasó lo mismo, pero no se animan a denunciarlo», sostuvo la joven futbolista en declaraciones televisivas. Además, añadió: «Siento asco y miedo. Este hombre sigue entrenando a chicos y cada vez que veía esa oficina sentía temor porque me recordaba lo vivido. Yo estuve en ese club hasta los 16 años y al no poder hablar no tenía excusas para dejar de ir a entrenar». La joven explicó que estos hechos vividos no se los contó a nadie «por vergüenza» y porque «nadie» le iba a creer, ya que una chica también había pasado por lo mismo, dos años después que ella, pero «nadie le creyó», al tiempo que Ludmila tampoco se animó a hablar. «Hoy lo puedo hacer público gracias a todas las chicas que se animaron a hablar. Sin ellas yo no hubiera podido hacerlo. No estamos solas. No nos callamos más. Lo conté porque el entrenador sigue dando clases y el sábado fue a la fiesta de fin de año». Por último, señaló que cuando se lo contó a sus padres «ellos se sintieron culpables» por lo que pasó pero ella enseguida aclaró: «Mamá, papá, no se sientan culpables. Este tipo es un degenerado y nadie sabía que eso iba a pasar». Fuente: NA. Fotos y video: Instagram / ludmimartinezz