Gonzalo Silva, el niño de 7 años que fue herido en la espalda por una bala perdida en medio de los festejos por el Año Nuevo, en la localidad bonaerense de Transradio, evolucionaba hoy favorablemente y se encontraba «consciente», aunque internado en terapia intensiva, según informó su padre. «Los médicos dicen que está bastante bien. Van a empezar a probar si puede tomar agua», señaló Ramón Silva en declaraciones a la prensa. Además, indicó que su hijo «está bien, descansando y durmiendo» y que se encuentra consciente en la Unidad de Terapia Intensiva del Hospital Garrahan, en el barrio porteño de Parque Patricios, adonde fue derivado desde una clínica de Monte Grande en la que le extirparon la bala. Gonzalo resultó herido en la madrugada de ayer, cuando un proyectil calibre 38 le impactó en la espalda, causándole una lesión en el hígado y los intestinos. En ese momento, el nene estaba mirando junto a su hermano, desde el balcón de su casa de Transradio, partido de Esteban Echeverría, los fuegos artificiales que marcaron el inicio del 2014. «Me pegaron un tiro», le dijo el menor a su madre, tras lo cual fue trasladado por un vecino a un centro asistencial. Su padre precisó que el proyectil le afectó «el intestino grueso, el intestino delgado y el hígado», y añadió que el niño sigue «en terapia intensiva y siente mucho dolor en la panza». En cuanto a la investigación, dijo que aún «no» fue identificado el autor del disparo, aunque consideró que «no debe (haber tirado de) muy lejos». «El tipo que habrá tirado para arriba o será un enfermo o alguien que no piensa en lo que puede pasar», se quejó, a la vez que lamentó que las balas perdidas son algo «común» durante los festejos de fin de año.
Gonzalo Silva, el niño herido por bala perdida evoluciona favorablemente
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