Vallejo tenía todo en su mano para convertirse en uno de los hombres de confianza del Papa Francisco, sin embargo, ahora se lo acusa de traidor.
Ángel Vallejo, miembro del Opus Dei, podría enfrentarse a una pena de entre cuatro y ocho años de prisión por su «traición», en palabras del portavoz de la Santa Sede, el padre Lombardi. Está acusado de robar documentos referentes a la economía y los planes de reforma de Francisco.
Una cuestión de dinero, pero también de poder. En el Vaticano a nadie se le escapa que los que cayeron este lunes son peones en una batalla en el seno del Vaticano.
Además de Ángel Vallejo, fue detenida la italiana Francesca Chaouqui (una periodista), que utilizó la información del mayordomo de Benedicto XVI para hacer explotar el escándalo de Vatileaks en el cual se descubrió que el Vaticano encubría causas de pedofilia.
Con todo, este escándalo de revelación de secretos es solo un movimiento más dentro de la encarnizada lucha en el interior de la Curia romana entre los detractores y partidarios de Francisco.
• Dos de los grandes objetivos de la reforma curial propuesta por el Papa chocan frontalmente con los intereses de los sectores más reaccionarios de la Curia. En primer lugar, por la apuesta por la austeridad, ya que Francisco quiere que se controle cada euro que sale de las arcas vaticanas. En segundo término, por la eliminación de cargos curiales, y de su rango.
En un futuro, el deseo del Papa es que los trabajadores de los organismos vaticanos no sean obispos, para eliminar la «casta episcopal» de la que Bergoglio ha hablado en más de una ocasión. Y eso, en una estructura tan jerárquica como la de la Iglesia romana, supondría el final de los privilegios de los grupos más conservadores. Especialmente del Opus Dei.
Un sacerdote de alto rango partidario de Francisco, Libero Milone, fue hackeado hace unos días. La investigación de este caso ha llevado a descubrir que los documentos hackeados, serían publicados en dos libros que verán la luz la próxima semana. Se trata de ’Avarizia’, de Emiliano Fittipaldi, y ’Via Crucis’ de Gianluigi Nuzzi.
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El Vaticano ha recordado en un comunicado de prensa que la divulgación de noticias y documentos es un delito previsto en la ley del Vaticano y ha resaltado que «publicaciones de este tipo no ayudan de ninguna manera a establecer claridad y verdad, sino más bien generar confusión e interpretaciones parciales y tendenciosas».
Fuente: http://www.eldiario.es/sociedad/Vatileaks-robo-Vaticano-Papa_Francisco-Vallejo_Balda_0_447955899.html