Iliana Calabró: «Acá las valijas con plata nunca llegaron»

Iliana Calabró habló por primera vez después de que Telenoche difundiera los videos del insólito movimiento de millones de dólares, pesos y euros en La Rosadita, la financiera que pertenecía a Federico Elaskar.

La mediática reconoció estar muy angustiada y con bronca por verse otra vez envuelta en el escándalo de la ruta del dinero K, y reveló que cuando vio a su exmarido en el informe le «corrió un calor por el cuerpo».

«Fue una sorpresa. Parecía como un cuento de una película que me estaban haciendo ver», admitió, en diálogo con Jorge Rial en radio La Red. «¿Qué gracia me puede dar que usen el apellido de mi papá a través mío? Estoy divorciada», reprochó.

Luego, aclaró que su familia no se «enriqueció» durante los 20 años de matrimonio con Rossi, aseguró que ella «no vende glamour» y que las únicas valijas que conoce son las que estaban «cargadas de maquillaje y de ropa».
«Hace 20 años que vivo en este departamento, al que me mudé gracias a mi papá porque a mi nunca me hubiera alcanzado. Él quería que viviésemos como él. Logré comprarme un lindo auto cuando estaba Tinelli y lo hice público, porque yo lo contaba. Iliana es la misma de siempre», sentenció.

Con respecto a la actividad de Rossi, la actriz comentó: «Yo sabía la historia de siempre, desde los 14 años. Creció a mi lado. Él usaba mi oficina, que es la casa de mi abuela, esa era su dirección. Allí asesoraba a gente con su marketing».

«Él llega a SGI a través de un contacto de mi papá. Federico Elaskar y Leo Fariña aparecen a través de esta financiera y Rossi trabajaba para ellos en marketing. No es de ‘pelotuda’ que no sabía, yo sabía que él laburaba como asesor de marketing en esa consultora», recordó.

Iliana también se refirió a cuando salió a defender a Rossi, ni bien estalló el escándalo, hace tres años. «Cuando hablé en Intrusos era otra Iliana, era otra circunstancia a hoy. En aquel momento me cayó el mismo baldazo, pero era una mujer que tenía su familia, tenía marido, a mi papá. Por eso salí como una leona encandilada defender a esa familia que tanto me costó y que se me estaba demoliendo. Yo no podía creer tampoco en aquel momento todo lo que pasó».

«Mi situación era esa, hoy no es la misma. Hoy estoy divorciada, sin padre al que tenía que mentirle, con dos hijos que son hombres, con una nueva relación (por Antonello), a punto de irnos de luna de miel. Siempre que estoy feliz algo me viene a romper la paciencia, no me voy a hacer cargo de lo que haya hecho mi ex», exclamó, ya notablemente enojada.

«En la ‘farandulización’ está en juego mi nombre», cerró Iliana.