Maria Strydom quería que el mundo viera de lo que son capaces los veganos, desafortunadamente, el destino le iba a deparar una terrible suerte cuando intentaba ascender hasta la cima del Everest.
Maria Strydom era una sudafricana de 34 años y vegana de corazón. Ella solo tenía un objetivo: demostrarle a todos que alguien que realizan una dieta basada en vegetales son capaces de «hacer cualquier cosa». Es por eso que se dirigió hasta el Himalaya junto con su esposo, Robert Gropel, ella no iba a detenerse hasta llegar a la cima del mismísimo monte Everest, el punto más alto sobre la faz de la Tierra.
Una dieta vegana no te vuelve necesariamente una persona débil, y María no lo era ni física ni mentalmente. Su meta era sencilla, aunque implicaba un gran esfuerzo; creía que pisando el punto más alto de la Tierra, uno de los grandes prejuicios para con los veganos finalmente se disiparía: «Parece que la gente tiene una idea de que los veganos estamos malnutridos y somos débiles. Al escalar las siete cumbres queremos demostrar que podemos hacer cualquier cosa y más»..
Lamentablemente, Maria no contó con la aparición de un enemigo para el que jamás estuvo preparada. Cuando partió del Campo Base 4, la última parada antes de llegar a la cima, comenzó a sentirse mal y se vio obligada a regresar. Su marido continuó la travesía, alcanzando finalmente los 8.848 metros sobre el nivel del mar. El mal de montaña provocado por la escasez de oxígeno hizo estragos en su salud. Un día después, Maria Strydom falleció.
Otro escalador del grupo sufrió la misma suerte, se trataba de Eric Arnold, un holandés de 36 años que murió debido a las mismas complicaciones. Aunque pudo llegar a la cima, su salud se complicó durante el descenso.
El cementerio más alto del mundo.
A pesar de los que muchos podrían llegar a opinar, el veganismo de Maria no tuvo nada que ver con su muerte. Muchos sobestiman el reto de escalar el Everest, y los peligros que ello conlleva. Para alcanzar la cima del mundo, a partir de los 8.000 metros hay que atravesar la llamada zona muerta o zona de la muerte. Recibe este nombre debido a las condiciones extremas que vuelven imposible para el ser humano aclimatarse.
El último tramo parte desde el famoso campamento 4, y es el más complicado del recorrido:se calcula que para ascender los últimos 800 metros, se demora entre 10 y 12 horas. Las temperaturas cerca de la cima tienen un promedio de 36º bajo cero, aunque en invierno puede llegar a alcanzar picos de -60º.
Fuente: http://elmeme.me/Fedetxt/escalo-el-everest-para-demostrar-que-los-veganos-pueden-hacer-lo-que-sea-y-murio-en-el-intento_128016