Japón Refuerza su Presencia Militar en Taiwán: Nuevos Misiles en la Mira
El ministro de Defensa de Japón, Shinjiro Koizumi, ha anunciado planes para desplegar misiles en una base cercana a Taiwán, en medio de crecientes tensiones con China.
Durante su reciente visita a la base de Yonaguni, situada en el sur de Japón, Koizumi afirmó que la instalación de misiles Tipo 03 Chu-SAM se encuentra en marcha y podría ser clave para reducir el riesgo de ataques armados. “Este despliegue no incrementará las tensiones en la región”, aseguró. En enero, su predecesor ya había mencionado la intención de colocar estos sistemas de defensa, pero los avances han sido limitados.
Los Detalles de la Estrategia Militar de Japón
Los misiles, que tienen un alcance de 48 kilómetros, están diseñados para contrarrestar amenazas aéreas en un contexto geopolítico cada vez más complicado. Koizumi señaló que, una vez que se finalicen los planes, se compartirán detalles con los residentes de Yonaguni, buscando involucrar a la comunidad local.
Reacción Internacional: Una Decisión Controvertida
La portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Mao Ning, criticó la decisión japonesa, catalogándola como una “acción peligrosísima” que alimenta la rivalidad militar en la región. Las tensiones han aumentado después de que Japón expresara su preocupación por el creciente poderío militar de China, especialmente en torno a Taiwán.
Implicaciones del Despliegue de Misiles
Situada solo a 110 kilómetros de Taiwán, la base de Yonaguni es estratégica para Tokio, que busca proteger su frontera más cercana a una posible crisis por el control de la isla. La situación se intensificó después de las maniobras militares chinas en 2022, cuando misiles balísticos fueron lanzados cerca de la isla en respuesta a la visita de una funcionaria estadounidense.
Reacciones Políticas en Japón y la Postura de Pekín
Las tensiones aumentaron aún más tras controversiales comentarios de la ministra Sanae Takaichi, quien sugirió que Japón podría considerar una respuesta militar conjunta con otros países en caso de un ataque a Taiwán. Esto desató una fuerte reacción de Pekín, que exige una retractación de esas afirmaciones, aunque un funcionario japonés ha desestimado las acusaciones chinas de un cambio en la postura de Japón.
En un contexto donde la diplomacia y la seguridad se entrelazan, el futuro de Japón en la región dependerá de su capacidad para manejar las complejas relaciones con sus vecinos y su compromiso con una defensa robusta.
