La trayectoria política de José Antonio Kast es una historia de transformación y perseverancia. Considerado un candidato sorpresivo en sus inicios, hoy se enfrenta a nuevos desafíos en su camino hacia La Moneda.

De Candidato Inesperado a Contendiente Serio

A lo largo de los años, José Antonio Kast ha pasado de ser un candidato improbable a convertirse en una figura central en la política chilena. Su primer intento en 2017 lo ubicó en un modesto cuarto lugar con un 8% de apoyo, pero no se dio por vencido. En 2021, logró ganar la primera vuelta, aunque terminó perdiendo en el balotaje frente a Gabriel Boric.

Ahora, a sus 59 años, Kast regresa a la contienda con un vigor renovado, habiendo alcanzado el 24% de los votos en la reciente primera vuelta, lo que le ha permitido avanzar a la segunda vuelta donde enfrentará a la candidata comunista Jeannette Jara.

Consciente de la importancia de la unión, ya ha recibido el apoyo de otros líderes de la derecha, como Johannes Kaiser y Evelyn Matthei, que suman un total de un 27% de los votos. «Quiero unificar el voto de oposición», ha afirmado Kast, evidenciando su determinación de consolidar su posición en el escenario político.

Raíces y Polémicas en su Trayectoria

Kast nació en Paine, a 59 años atrás, siendo el menor de diez hijos de inmigrantes alemanes. Su familia ha estado rodeada de controversias, particularmente sobre el pasado de su padre, quien fue vinculado a la Alemania nazi. A pesar de ello, Kast ha tratado de distanciarse de esos rumores, insistiendo en que su historia familiar es muy diferente.

El exdiputado ha mantenido posiciones firmes a favor del régimen militar de Augusto Pinochet, lo que ha generado división entre los votantes. A lo largo de su carrera, ha defendido el legado de Pinochet mientras se opone a las etiquetas de «ultraderecha» que muchos le asignan.

Un Nuevo Modelo de Derecha

Kast ha sido parte fundamental en la creación de un nuevo modelo de derecha en Chile. Tras abandonar la Unión Democrática Independiente (UDI), fundó el Partido Republicano, un movimiento que busca atraer a electores insatisfechos con la derecha tradicional. Algunos analistas lo ven como un representante de una «derecha nacionalista populista», similar a líderes de otros países como Donald Trump o Javier Milei.

Retos y Oportunidades en la Campaña

Con unos desafíos cruciales por delante, Kast se enfrenta a la necesidad de reforzar su apoyo femenino mientras trata de dejar de lado temas como el aborto, su férrea oposición a los derechos reproductivos ha sido un punto delicado en campañas anteriores. En la presente contienda, ha intentado moderar su imagen para atraer a votantes indecisos.

Sin embargo, esto no ha estado exento de críticas. Su posibilidad de captar el voto femenino podría verse compliciada en su enfrentamiento con Jara, una candidata que ha dado voz a temas de gran relevancia para las mujeres. La balanza en la política chilena podría inclinarse a favor de un candidato que logre conectar con las preocupaciones de este segmento, especialmente en un contexto electoral polarizado.

Propuestas y Discursos en el Marco Electoral

Kast ha centrado parte de su plataforma en temas como la seguridad y la inmigración, haciendo eco de campañas similares a las de sus pares en el extranjero. Una de sus propuestas más controversiales es la instalación de barreras físicas en las fronteras chilenas para controlar la inmigración irregular, un enfoque similar al que utilizó Trump en Estados Unidos.

Sus declaraciones sobre la seguridad han resonado en un electorado que, a pesar de contar con índices de violencia menores que en otros países de la región, aún siente incertidumbre en torno a este aspecto clave.

A medida que se acercan las elecciones, el camino de Kast parece estar lleno de obstáculos, pero también de oportunidades para consolidar su legado político. Con un electorado que ha experimentado cambios constantes y un ambiente político volatile, el tiempo dirá si finalmente su tercer intento por llegar a la presidencia será el definitivo.