Una de las ventajas de los créditos hipotecarios en Unidad de Valor Adquisitivo se habría perdido por efecto de la inflación que se registró durante 2018 y por el efecto de la devaluación.
Las cuotas de los nuevos créditos entregados ya estarían por encima del valor de un alquiler. Cuando se entregaron los primeros créditos y hasta el año pasado, la ventaja era que el precio de una cuota era más bajo incluso que un alquiler. Quienes tomaron los créditos hasta antes de la devaluación, mantienen ese valor, pero no sucede lo mismo con los que están tomando préstamos para viviendas en la actualidad.
Según un informe de Ámbito Financiero, hoy eso ya es parte de la historia, por lo menos en la Provincia de Buenos Aires. Las principales razones serían los cambios en las reglas para acceder a los créditos hipotecarios von tasas de financiación llegaron a duplicarse.
Como ejemplo, para recibir $1 millón a 30 años, a través de los UVA, se debe ganar al menos $25.284, lo que representa un incremento de $6.000 respecto de las condiciones que existían hace un año. A eso, se suma que la tasa pasó de 3,5% al 9%, dependiendo del banco.
Las UVA representan la milésima parte del costo de un metro cuadrado de construcción y su valor se actualiza cada día de acuerdo a la inflación.
Por eso quien ya sacó un crédito ha visto incrementado el monto de su cuota en un 20%, de la mano de la inflación interanual.
Sin embargo, según datos de inmobiliarios porteños, «un crédito hipotecario para un dos ambientes es en promedio de $14.000, cuando se puede conseguir por menos de $10.000 un alquiler de un departamento de características similares».
La suba del dólar, el incremento de las tasas y los precios de los alquileres más accesibles parecen hoy inclinar la balanza hacia las locaciones.