En los próximos meses viviremos un período estival enrarecido, ya que no podremos vivir el fervor de la Copa del Mundo en su contexto habitual. Habrá que esperar hasta el mes de diciembre para conocer quién será el campeón de la Copa más especial de todas. Pero no hay que desanimarse en exceso, ya que en unos días se disputa un trofeo de nueva creación.
El mundo del fútbol de selecciones es un universo fluctuante. De manera constante van apareciendo nuevas competiciones que cambian el paradigma establecido. La consolidación de estas propuestas ofrece también nuevos horizontes a los elementos que orbitan alrededor del esférico, como es el caso del periodismo deportivo, el sector de las apuestas en directo, los hashtags en redes sociales y toda la programación audiovisual.
Y el nombre de este nuevo trofeo es el de Finalísima, una nueva competición oficial que enfrentará al campeón de la Copa de América con el vencedor de la Eurocopa. Ha sido un formato planteado por la CONMEBOL y la UEFA, que quieren otorgar aún más importancia al hecho de ganar sus respectivos torneos continentales. Se toma el relevo de la difunta Copa Artemio Franchi, un torneo avalado por la FIFA, y que solo se disputó en dos ocasiones: en 1985 y 1993. Los campeones fueron Francia y Argentina, ganando también la Copa América de ese mismo año.
El próximo día 1 de junio se disputará el único partido que conformará esta nueva Copa, siendo las selecciones clasificadas la de Argentina y la de Italia. El combinado albiceleste selló su participación para la Finalísima el pasado 10 de julio de 2021, cuando levantó la Copa América ante Brasil. Era el 15.º título para el país, y fue una fecha destacadísima en la carrera de Lionel Messi, quien finalmente pudo celebrar un título con la Selección. Los italianos levantaron la Eurocopa un día después, el 11 de julio de 2021, tras vencer a Inglaterra en la tanda de penaltis.
El partido se disputará en el césped de uno de los mejores estadios del mundo: Wembley. Se trata de un escenario de muy buen recuerdo para Lionel Messi, ya que allí ganó la Champions League con el FC Barcelona en 2011. Fue una exhibición espectacular del astro argentino, quien anotó el segundo gol del partido. El Manchester United se mostró absolutamente impotente frente al vendaval barcelonista.
Como curiosidad, la Finalísima no contará con tiempo añadido. Cuando hayan finalizado los 90 minutos reglamentarios, el partido irá directamente a la tanda de penaltis. El duelo iniciará a las 20:45h del 1 de junio, hora local, y los jugadores afrontarán el choque teniendo en cuenta que se trata de un torneo de competición oficial. Es decir, podrá ser sumado al palmarés particular de las distintas federaciones. Una manera de dar aún más trascendencia a un partido que se presupone tremendamente igualado, más teniendo en cuenta que la selección transalpina no ha logrado clasificarse para el próximo Mundial. Sería una forma de redimirse de este gran fracaso nacional.
La elección del árbitro será consensuada entre las dos federaciones, y en fecha de redacción de esta pieza todavía no se conoce el nombre del implicado.
Entre algunos de los nombres propios más destacados que pisarán el césped del estadio inglés, encontramos a Donnarumma, Jorginho, Bonucci, Insigne o Verratti, por la parte italiana; y Messi, Julián Álvarez, Emi Martínez o Dybala para Argentina.
El seleccionador nacional, Lionel Scaloni, ha concentrado a los jugadores en España –concretamente en Bilbao, una de las ciudades más importantes del norte peninsular. Es aquí donde el técnico empezará a preparar el partido, y ordenará a los jugadores de cara a mostrar una versión competitiva. El ambiente es muy positivo y los héroes se muestran esperanzados por sumar el título. Sería un escenario magnífico para empezar a presentar candidatura para el próximo mundial de Qatar. En un par de días saldremos finalmente de dudas.