La guerra de las Malvinas

La guerra de malvinas fue una disputa bélica que ocurrió entre abril y junio del año 1982 y que enfrentó a Gran Bretaña con Argentina. El motivo de la disputa, gracias a lo cual el evento debe su nombre, fue la posesión de las llamadas islas Malvinas, un archipiélago ubicado a poca distancia de Argentina, que siempre las ha reclamado como suyas, y a decenas de miles de kilómetros de Gran Bretaña, que las administra desde hace más de un siglo.

Este conflicto dejó muchos muertos y heridos, en particular para Argentina, que perdió el conflicto bélico con una diferencia bastante elevada de bajas en relación a su rival. Las secuelas del conflicto continúan hasta hoy, con veteranos de ambos bandos que requieren de atención. El problema, por otra parte, sigue sin resolverse, ya que Argentina continúa su reclamo pese a haber perdido la guerra.

El archipiélago

Las hoy conocidas como islas Malvinas fueron halladas por Fernando Magallanes en el año 1520. Su descubrimiento le dio a las islas una proyección española que fue ratificada cuando, poco después, los colonos de la nación ibérica comenzaron a expandirse por el continente e incorporaron al archipiélago como posesión hispana. Pese a ello, debido a su situación geográfica, las islas pasaron numerosas veces de dueño en dueño. Los segundos en poseerlas fueron los ingleses, quienes las renombraron como Falkland, nombre aún hoy usado.

Posteriormente fue tomada por los franceses, tras lo cual fue comprada por los españoles hasta la independencia de Argentina, en el siglo XIX, momento en el cual la imposible gobernabilidad de las provincias del Río de la Plata facilitó que, en 1833, Gran Bretaña colonizara el archipiélago con facilidad.

Los ingleses y Sudamérica

Las ambiciones coloniales inglesas en territorio sudamericano han sido siempre importantes. En este marco se inscriben sus perpetuos ataques a la costa de Cartagena, donde fueron rechazados, y también sus continuos intentos de hacerse con territorios en el Río de la Plata, en Argentina, terminando repelidos en varias ocasiones. Inglaterra logró finalmente tomar posiciones en Guyana, al norte de Sudamérica, en Belice y en las islas Malvinas. Este afán se debe al deseo de control comercial y a las aspiraciones de influencias británicas.

El siglo XX

La ocupación de las islas jamás fue admitida por Argentina, y fueron muchas las maniobras usadas por la nación sudamericana para intentar recuperarlas. Pese a ello, nunca se había contemplado el uso de la intimidación militar, probablemente por la clara superioridad de la armada británica sobre la armada argentina. Entre los éxitos de las maniobras diplomáticas argentinas, está que en 1960 las Naciones Unidas pidiesen devolver el archipiélago a Argentina.

La dictadura argentina

Poco tiempo después de este reconocimiento, en el año 1976, se instala una junta militar que presidía la nación de manera autoritaria. Su impopular gobierno afrontaba la oposición tanto de las víctimas de la represión, que eran la mayoría de los ciudadanos, como de la difícil situación económica que atravesaba el país para ese momento. De esta época se desprenden diversos conflictos, entre ellos el de Malvinas, con el objetivo por parte de la dictadura de acopiar apoyo popular.

Un intento de guerra contra Chile fue frenado gracias a la mediación del papa. Argentina pagaría este embate caro cuando se enfrentase a Gran Bretaña, pues entre los pocos países que se solidarizaron con la nación rioplatense, Chile no fue uno de ellos. Y el apoyo chileno hubiera podido ser decisivo. La necesidad de respaldo fue una de las principales causas de la guerra de Malvinas.

Situación en Gran Bretaña

Gran Bretaña recibió la ocupación con consternación. Era un reto que una nación significativamente menos favorecida se atraviese a desafiar al coloso británico. Fue, además, una afrenta de dignidad, pues se asumía como una de las primeras veces en las que un territorio británico era atacado y ocupado por un país invasor. Una parte importante de los mejores equipos ingleses fueron enviados al conflicto, del que resultaron airosos.

Consecuencias del conflicto

La principal de las consecuencias de la guerra de las Malvinas vino para la nación sudamericana: la dictadura cayó poco tiempo después de temrinarse el conflicto debido a que esta guerra era la única plataforma de apoyo popular que la dictadura había logrado consolidar. Argentina no volvería a intentar retomar las islas de manera violenta y las relaciones con Gran Bretaña quedaron en el aire. Las Malvinas han sido un cúmulos de problemas diplomáticos desde entonces.