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La moda y las tendencias siguen siendo dos de los conceptos que más preocupan a hombres y mujeres… pero especialmente a ellas, que son las que más juzgadas se sienten por todo lo que les rodea.
Si la principal preocupación estética de los hombres, o una de las que más, es la caída del cabello, las mujeres viven constantemente siendo juzgadas por la ropa que llevan, su peso, la celulitis, su aspecto estético. En menor medida, los hombres también son juzgados por su peso, pero esta idea se multiplica en el caso de las mujeres.
Seguimos viviendo en una sociedad muy machista en la que de manera frecuente se culpabiliza a las mujeres por acudir a ciertos lugares vestidas de uno u otro modo y existen estereotipos de género todavía muy interiorizados.
De algún modo, la industria de la moda alimenta estos prejuicios o estos estereotipos de género y todos, tanto hombres como mujeres, participamos de esta problemática.
No se puede culpar a la moda de esta situación, pues al fin y al cabo, la industria de la moda y la belleza lo único que pretenden en seguir hacia delante y hacer negocio. Y ni mucho menos debemos culpabilizar a hombres y mujeres por caer en estos estereotipos.
Por tanto, ante esta situación, lo que debemos hacer es ser conscientes de que estos prejuicios y estos estereotipos de género existen e intentar derribarlos, en un proceso que va a durar más tiempo del que creemos, porque la principal arma para derribarlos es la educación.
No juzgar a las personas por su físico ni su apariencia
Para evitar estas situaciones, la primera medida ha de pasar por no juzgar a las personas por su físico ni su apariencia. No se trata únicamente de no juzgar a aquellas chicas o chicos que se salen de la norma, de lo impuesto socialmente, sino también de no hacerlo con aquellas personas que, aparentemente, únicamente muestran interés por el mundo de las tendencias.
Una de las máximas preocupaciones de muchas chicas es el aspecto de su pelo. Que luzca sedoso y con salud es posible gracias a productos capilares como las mascarillas. En TodoBelleza.wiki orecen una amplia tabla comparativa con las mejores mascarillas de pelo.
En cuestiones de Moda y Belleza, el pelo es quizás lo que más preocupe a los hombres, pero no por el tipo de corte, sino por la caída. Muchos hombres se sienten juzgados cuando comienzan a sentirse calvos, y eso les hace perder autoestima. Siguen siendo las mujeres las que más se ven cuestionadas por temas relacionados relacionados con la Moda y la Belleza, pero es un problema que también les afecta a ellos. Por supuesto, y como comentamos, nadie debe ser juzgado por su aspecto, pero tampoco por interesarse por la Moda y la Belleza.
Los agentes y actores de la moda, diseñadores, compañías de moda, analistas… son también responsables de este fenómeno de criminalización de aquellas personas que no se ajustan a los cánones de belleza.
En las situaciones más graves, esto puede degenerar en graves trastornos mentales y alimenticios, chicas y chicos que no se sienten comprendidos y que caen en enfermedades como la anorexia y la bulimia por encajar en los cánones que impone la sociedad de la imagen.
La moda, una de las grandes industrias que mueve el mundo
Toda esta obsesión por la imagen y el apartado estético convierten a la moda en una de las principales industrias del mundo. Por esta razón, desde Naciones Unidas no dejan de poner el foco en este negocio para tratar de hacer frente a las desigualdades que genera y los problemas a nivel ecológico.
Buena parte de la moda que se consume en todo el mundo está fabricada en países en los que no se respetan los derechos laborales y, en algunos casos, incluso se roza el esclavismo.
A esto hay que sumar que la moda tiene un costo enorme debido a los desechos textiles, la contaminación del agua, el uso de sustancias químicas y el trabajo forzado. Como en otros sectores, prima la rentabilidad económica y esto genera una fuerte presión para reducir costos y tiempo de producción.
Un informe publicado en la última reunión de la Comisión Económica de las Naciones Unidas para Europa reveló que la industria de la moda, con un calor global de 2.500 millones de dólares, es el segundo usuario de agua más grande del mundo. La producción de una camisa de algodón requiere de 2.700 litros de agua.
En el evento «La Moda y los Objetivos de Desarrollo Sostenible: ¿Qué papel tiene la ONU?», esta organización advirtió que la práctica de la industria está progresivamente más dirigida hacia producir cada vez más cantidades de ropa barata y desechable.
Por esta razón, iniciativas como las que propone la tienda online Micolet.it son bienvenidas. Se trata de una tienda online de ropa de segunda mano para mujer en la que encontrar prendas usadas en buen estado a precios económicos, una interesante fórmula de darle una segunda vida a la ropa.
Esta práctica no es novedosa, pues la compra venta de prendas de segunda mano es una constante desde hace años. Con el desarrollo de internet y las aplicaciones móviles, prácticamente cada día aparecen nuevas apps en las que los usuarios compran y venden ropa usada de todo tipo, y tiene especial interés la ropa de bebés y el sector de la puericultura.
La cirugía estética, otro sector que se alimenta de estos estereotipos
La moda no es la única industria que saca partido de estos estereotipos. Otro sector que hace negocio alimentando estas ideas es el de la cirugía estética.
Sin embargo, son muchos los profesionales que se adentran en este oficio no para hacer perdurar estos prejuicios, sino para que las personas ganen en autoestima y pierdan los complejos con su físico.
Los países en los que se producen más intervenciones de este tipo son los países desarrollados y las principales economías del mundo. La nueva tendencia en USA en cirugía plástica se encuentra en México, las personas ubicadas en USA, tanto latinos como otros, están buscando a los mejores doctores cirujanos ubicados en este país. Para ello, acuden a espacios como Galvan Plastic Surgery Institute, que cuenta con destacados profesionales de la medicina plástica pero en donde los tratamientos son económicos. Esto es lo que lleva a los habitantes de Midland Estados Unidos (USA) a buscar un lugar donde recibir una cirugía estética de calida pero low cost.
En Europa ocurre algo similar, siendo el país de destino Turquía. Los tratamientos capilares en el país otomano son más económicos que en otros países europeos, hasta el punto de que cada semana cientos de europeos con problemas de alopecia viajan hasta Estambul a ser tratados en las clínicas turcas.
