La muerte de dos fanáticos del Indio Solari en el multitudinario recital de Olavarría terminó opacando toda fiesta. Además de las trágicas víctimas, la sobreconcurrencia trajo desesperación en la gente e incluso algunos incendiaron la terminal de ómnibus de la ciudad.
Pero el Indio Solari no salió inmune. Su productora Chacal Producciones, dirigida por los hermanos Matías y Mauro Peuscovich, comenzó a recibir los primeros embates de la Justicia debido al alto nivel de descontrol.
Más de 100 mil entradas sobrevendidas hasta pocas horas antes del evento, nulos cacheos, excesivos puntos de comercialización de alcohol son algunas de las irregularidades que se le adjudican a la empresa.
Por ello, la Justicia notificó a la productora del Indio Solari por «averiguación causales de muerte», lo que constituye ser una carátula provisoria que amenaza con convertirse en algo más grave.