En los pasillos del Casa Rosada y en el Congreso, los funcionarios no pueden evitar hablar y comentar los episodios de House of Cards, la serie que retrata la inescrupulosa vida y ascenso a la presidencia de un diputado corrupto. Sin embargo, Macri parece ser un poco más refinado en sus elecciones televisivas. La danesa Borgen es su preferida y su recomendación personal a sus equipo, si de entretenimiento se trata.
En un encuentro que mantuvo con el periodista Ari Paluch, el Presidente indicó que “no encuentra a la serie House of Cards semejante a la realidad con la que le toca lidiar cada día”. Aún más define al producto de Netflix como divertido pero estúpido. En base a ello sugiere a los funcionarios que opten por la danesa Borgen, a la que considera un “extraordinario calco de la realidad política”.
Borgen es un drama político que refleja los entretegidos del poder y su relación con los medios de comunicación. La creación de Adam Price, producida por Danmarks Radio, servicio público de la RTV danesa, narra el ascenso de una carismática Birgitte Nyborg al puesto de Primera Ministra de Dinamarca, y como el poder influye en su vida profesional y personal. Se conoce como Borgen al castillo de Christiansborg donde se encuentran los tres poderes del estado danés: el parlamento, la oficina del Primer Ministro y la Corte Suprema.
A diferencia de Macri, su antecesora se declaró fanática de la serie Game of Thrones. Desde su cuenta de Facebook, la ex mandataria contó “cuando los de DirecTV vinieron a verme para anunciar nuevas inversiones les pedí si por favor podían traerme la tercera temporada (que es la que se está emitiendo ahora), pero me trajeron los CDs de la segunda temporada (ya la había visto). Me aseguraron que ellos tampoco la tienen todavía completa, que ni a ellos se la dan… mmmmm!”, comentó a modo de chiste.