Tres delincuentes disfrazados de policías simularon hoy un allanamiento en una casa y al grito de «¡abran, policía!» lograron entrar a la vivienda, esposaron a la familia y se robaron un auto y más de 170.000 pesos, informaron fuentes policiales.
El robo ocurrió poco antes de las 6 en la localidad bonaerense de Wilde, en una propiedad ubicada en la calle Salcedo 313, en el sur del conurbano bonaerense.
Todo se inició cuando los delincuentes, dos hombres y una mujer que estaba uniformados con ropas similares a las que usa la policía bonaerense, llegaron a la casa al grito de «¡policía, policía; abran, policía!».
En la vivienda estaba Rodolfo Amaya, de 66 años, junto a otros seis integrantes de su familia, quienes al ver los uniformes pensaron que se trataba de verdaderos policías. Eran dos hombres y una mujer.
Los falsos policías llegaron justo cuando Amaya estaba a punto de salir del domicilio con su auto Volkswagen Gol, rumbo a la provincia de Salta, de donde es oriundo, para llevar una suma de dinero que, de acuerdo a la denuncia, eran 7.000 dólares y 60.000 pesos, es decir, alrededor de 175.000 pesos al cambio de hoy.
Los asaltantes amenazaron a la familia con pistolas 9 milímetros, algunos de sus integrantes resultaron golpeados y al menos dos de ellos terminaron esposados.
La banda de falsos uniformados se retiró de la casa robando el auto Voilkswagen Gol, con las valijas que tenía cargadas, y el dinero.
El caso, caratulado como «robo y lesiones», es investigado por la comisaría 5ta. de Avellaneda y el Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 1 descentralizada de Avellaneda, a cargo de la fiscal María Olmos Coronel.