La oficial Lourdes Espíndola ya había terminado sus adicionales en el Peaje Quintana en Ituzaingó, provincia de Buenos Aires, y estaba esperando el colectivo para regresar a su casa. Allí la esperaban su pareja y su hijo.
Sin embargo, fue sorprendida por dos delincuentes a bordo de una moto que le quisieron robar el arma reglamentaria. Tras forcejear, uno de los ladrones le disparó un balazo en el cuello.
La joven policía, que presta servicios en el Comando de Patrullas de Moreno, quedó tendida en el suelo, mientras los ladrones aprovecharon para llevarse su revólver. En medio del shock por el disparo, Lourdes llegó a mandarle un mensaje de texto a su marido, también miembro de la fuerza: «Me dispararon, me estoy muriendo», señaló.
La oficial fue trasladada de urgencia al Hospital Posadas.
Según se pudo saber, Lourdes fue intervenida por el balazo que ingresó en el cuello y perforó la arteria aorta.
La oficial quedó internada en estado crítico en terapia intensiva.
Por la gravedad de las heridas, los médicos desaconsejaron el traslado en helicóptero al Hospital Churruca.