LA FIESTA EN EL OBELISCO

Miles de argentinos colmaron el Obelisco para festejar el triunfo de la Argentina; los bares, repletos de fanáticos que siguieron el partido.

Miles de argentinos colmaron este mediodía el Obelisco para celebrar el arrollador triunfo del seleccionado argentino frente a Serbia y Montenegro (6-0). De los bares céntricos brotaron los fanáticos hacia la avenida Corrientes y 9 de Julio para compartir el festejo. Los gritos eufóricos y los cánticos se mezclaron con el sonido de las bocinas de los autos que recién comenzaban a salir a las calles desiertas.

Durante el partido, los bares porteños estuvieron repletos y las calles, locales comerciales y colectivos, vacíos. Sólo unas pocas personas caminaban por la ciudad, en su mayoría, turistas. Minutos antes del encuentro, cientos de personas apuraban su paso por la calle Florida. Dos hombres con camisetas argentinas corrían con un televisor gigante. Casi todo estaba listo.

En la avenida Corrientes, agolpados en la vidriera de una tienda de electrodomésticos unos 60 trabajadores miraban el encuentro, mientras que una camioneta blanca con el estéreo a todo volumen transmitía en vivo. Enrique no levantó su puesto callejero de lustrabotas, pero dejó todo preparado para no perderse ni una sola jugada. Con una radio en la mano escuchaba atentamente el partido y se levantaba en puntas de pie para mirar desde la vidriera el televisor de un local vecino.

La mayoría de los locales estuvieron abiertos, aunque la actividad era ínfima. Así, con bizcochitos, mate y facturas, los empleados se arrinconaban frente a los televisores para seguir al instante cada detalle del partido. Sin embargo, algunos empresarios habían decidido cerrar directamente sus locales o habían dispuesto una actividad reducida. Incluso, una entidad bancaria, en Lavalle y Florida, atendía a los clientes a puertas cerradas con menos personal.

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Fuente: http://www.lanacion.com.ar