Según el matutino, durante el acto de
conciliación ante el Tribunal el miércoles, se leyó la carta del
astro del fútbol en que aclaró sus dichos pronunciados en una
emisión de su programa de televisión "La noche del 10" en agosto del
2005.
En la ocasión, el ex capitán de la
selección argentina dijo, en alusión a su hijo homónimo que tuvo con
la italiana Cristina Sinagra, que estaba pagando sus errores con
dinero y que sólo tenía dos hijas, Dalma y Giannina. Y al aludir a
la decisión de la justicia italiana de reconocer a su hijo, afirmó
que "aceptar no es amar".
Maradona fue demandado por difamación
y por falta de pago de la cuota alimenticia desde que su hijo
cumplió 18 años.
Enviada por los abogados de Maradona
en Milán, Hugo Pruzzo y Giuseppe De Naro Papa, el retirado jugador
menciona que sus palabras provocaron un "malentendido".
"Cuando dije esas cosas en Argentina,
no quería ofender a nadie. Si mis palabras fueron percibidas como
ofensas, ocurrió contra mi voluntad", afirmó.
Maradona pagó las cuotas alimenticias
atrasadas y puso a disposición de su hijo todo el dinero que debería
pagarle hasta cumplir los 25 años.
Su hijo se declaró contento y dijo
que "no se lo esperaba", aunque precisó que "mi padre no tiene en mi
vida el lugar que hace algunos años esperaba que tuviera".
Cuando le consultaron los periodistas
si lo había perdonado, el hijo se limitó a responder que "hacia él,
he sentido más rabia que rencor".
"Rabia que siente un hijo en
determinados momentos de su vida cuando no tiene a su padre junto a
él, ahora, sin embargo, he crecido, he entendido quien está
realmente en mi vida, cada día. No ha sido hermoso lo que ha
sucedido, pero ahora ya no cuenta más", expresó.
Rechazó la idea que la carta de su
padre pudiera ser considerada un regalo y lo considero "una cosa
normal, hecha por una persona que se ha dado cuenta que se ha
equivocado".
También declinó confesar si se había
emocionado: "Estas cosas prefiero guardarlas para mí".
Dijo que no había pensado en tomar un
avión para ir a verlo: "Si quiere encontrarme, debe ser él quien
tenga que venir, yo no iré a ninguna parte".
Su madre precisó que "nosotros no
hemos jamás querido especular sobre esta historia. Diego ha recibido
simplemente lo que le correspondía, es decir, el pago adeudado por
los alimentos. Nosotros queremos tener una relación pacífica, normal
entre un hijo y un padre, nada más"