PORQUE RONCAN LOS
NIÑOS?
Los pequeños que respiran
ruidosamente habitualmente presentan problemas de concentración,
memoria y son propensos a la hiperactividad. Los ronquidos suelen
aparecer a partir de los veintidós meses y los padres nunca deben
pasar por alto esta señal
El "hacer un ruido bronco con el
resuello cuando se duerme", lo que se conoce popularmente como
roncar, es un desorden de la salud bastante común entre los adultos,
además de un problema social importante, ya que las personas que
comparten la cama con alguien que ronca pueden tener serias
dificultades para dormir.
En algunas ocasiones, el ronquido
puede ser una señal de un trastorno denominado apnea obstructiva del
sueño (SAHS). La persona que lo sufre, experimenta lapsos sin
respiración de más de diez segundos mientras duerme, los cuales van
seguidos por un ronquido o jadeo súbito cuando se reanuda la
respiración y después el ronquido comienza de nuevo.
Este ciclo suele ocurrir varias veces
durante la noche, y también puede afectar a los niños.
"El ronquido no es saludable", afirma
el doctor Gonzalo Pin, de la Unidad Valenciana del Sueño del
Hospital Quirón, en Valencia. Explica que "el ronquido es el primer
síntoma de trastornos respiratorios relacionados con el sueño como
la apnea del sueño y, además, ocasiona de por si problemas de
concentración, memoria e hiperactividad".
Se calcula que un 10 por ciento de
los niños roncan de forma habitual, sobre todo a partir de los
veintidós meses, aunque su frecuencia va disminuyendo desde los
nueve años.
Se define que un niño ronca cuando lo
hace más de tres veces a la semana y no está asociado a un
constipado. "Los niños que roncan" explica el doctor Pin- tienen un
porcentaje menor del sueño REM (sueño con Movimiento Rápido de los
Ojos), y éste es más inestable. Durante el día, esto se traduce en
un niño con menor capacidad de memoria y concentración.
Las claves del ronquido pediátrico
Además, el ronquido pediátrico habitual se asocia a un pobre
rendimiento escolar y se ha observado en distintos estudios que
alrededor del 30 por ciento de los niños que roncan presentan
puntuaciones más altas de la escala de hiperactividad.
Del 10 por ciento de los niños que
roncan de forma habitual, "entre el 3-4 por ciento desarrollará una
apnea del sueño", explica el doctor Oscar Sans Capdevila, de la
Unidad de Trastornos del Sueño del Hospital Sant Joan de Deu, en
Barcelona.
Este trastorno ocasiona pausas
respiratorias que condicionan bajadas del oxígeno en sangre y hace
que el niño tenga despertares con calidad del sueño fragmentado.
La evolución del ronquido a la apnea
puede suceder en un breve margen de tiempo, entre seis meses a un
año. De ahí, la importancia -subraya este experto- de que el padre
comunique al médico si su niño ronca.
No obstante, según destacan estos
especialistas en trastornos del sueño, "son pocos los padres que
están concienciados sobre la necesidad de informar al pediatra de
que su niño ronca. Se piensan que es algo normal y no le dan la
importancia que el asunto merece. De forma que sólo se identifican
si el pediatra realiza alguna pregunta específica".
De acuerdo con los datos del doctor
Pin, "si un pediatra tiene un cupo de 900 niños al menos 14 roncan
de forma habitual por la noche, sin embargo, la mayoría de ellos no
están identificados".
Por otro lado, "la exploración
clínica rutinaria y la historia clínica no son métodos
suficientemente fiables y tan sólo tienen un factor predictivo del
55 por ciento".
Para este pediatra es fundamental
identificar a los niños roncadores, vigilar la aparición de posibles
síntomas que surgieran SAHS, y estar especialmente atentos a todos
los niños con hiperactividad o alteración de la conducta.
Los ronquidos se producen con mayor
frecuencia en los niños con sobrepeso. De hecho, la obesidad es un
factor de riesgo importante de los trastornos respiratorios durante
el sueño.
Según el doctor Gonzalo Pin, "un niño
que no duerme bien por la mañana no tiene ganas de hacer ejercicio,
está más cansado e irritable. De igual forma la obesidad produce
alteraciones en la sustancia que regulan el apetito".
"Se calcula que en los niños obesos
se multiplica por seis el riesgo de presentar trastornos del sueño",
según el doctor Sans, que recuerda que otra de las principales
causas de los ronquidos es el tamaño mayor de las vegetaciones y
amígdalas.
Frente a los ronquidos, los expertos
recomiendan adoptar hábitos de vida saludable. "Al igual que en
otros trastornos donde está implicada la obesidad es fundamental
promover hábitos de vida saludables entre los niños ya que se
evitarán gran parte de los problemas", aconseja Sans.
EFE
Compartir este articulo : | | | | |
|