Un año de cárcel
por grabar a su hija en el baño
El hombre fue condenado por violar la
intimidad de su familia. Al parecer, tenía sospechas de que su
progenitora adolescente sufría de anorexia, y, frente a sus
negaciones sobre el tema, instaló una cámara y confirmó lo que
creía. La chica hoy se encuentra en tratamiento por la enfermedad
Un vecino de Balaguer, Jorge M.V.,
fue condenado a un año de prisión por un delito de violación a la
intimidad por haber instalado una cámara en el baño de su casa para
grabar a su hija adolescente ante de las sospechas que sufría de
anorexia. El hombre colocó la cámara para comprobar si su hija se
provocaba el vómito. El condenado no estaba equivocado, ya que la
chica está ahora a tratamiento por este desorden alimentario, según
publica el diario Segre.
Los hechos ocurrieron en 2007 cuando Jorge M.V., ya separado de la
madre de sus dos hijas, sospechó que una de ellas sufría anorexia.
La adolescente no lo admitía y por ello la estuvo grabando durante
varias semanas, de forma que también vulneró la intimidad de la otra
hija. Sólo el padre y el abuelo sabían que se había instalado la
cámara de vídeo. En tanto, el condenado destruía las cintas tras
visionarlas.
El hombre cumplirá una pena de un año de prisión y una multa de
1.080 euros. Tampoco podrá comunicarse ni acercarse a menos de 150
metros de sus dos hijas ni a su ex mujer durante cinco años. También
deberá abonar 3.000 euros a cada una de las hijas por daños morales
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