CHEVROLET CAPTIVA LT (Nafta) - PRECIOS Y
EQUIPAMIENTO
Con
sus 136 CV, el Captiva naftero no sorprenderá a nadie en materia de
prestaciones, pero a cambio se posiciona como una de las variantes
más accesibles para quien busca un SUV con buen nivel de calidad,
comodidad interior y tracción integral. Probamos la versión de
entrada de gama.
El año pasado el producto de Chevrolet
sumó una opción naftera nunca testeada, hoy objeto de esta
evaluación. Se ubica como la más accesible de la gama con un único
nivel de equipamiento, cinco plazas e impulsada por un 2.4 de 136
caballos asociado a una caja manual de cinco marchas.
El Captiva que se comercializa en nuestro país es prácticamente
idéntico al que se vende en Europa. Sus curvas lo hacen sobrio y
robusto, con musculatura y una estampa con personalidad. La variante
LT presenta algunas diferencias estéticas respecto de la LTZ (full
Diesel), tales como los paragolpes sin molduras grises en las partes
bajas y las salidas de escape más angostas, con una impronta menos
deportiva.
El Chevrolet Captiva tiene una garantía de tres años ó 100.000
kilómetros.
Su perfil permanece inalterado, con guardabarros y bajos en plástico
negro, cubiertas 235/60 montadas sobre llantas de aleación de 17
pulgadas de seis rayos, espejos con luz de giro incorporada y barras
en el techo. Sin causar mucho revuelo, bastan para que los peatones
lo miren de reojo al pasar, como espiando ese algo de Opel que se le
escapa por la silueta.
Adentro también hay algunas modificaciones: carece de la pantalla
del ordenador (portaobjetos en su lugar), las butacas se recubren
con tapizado textil, y pueden divisarse las teclas “vacíasâ€? del
plegado eléctrico de los espejos, el control de tracción y
estabilidad y el de descenso. También se siente la falta del
climatizador, el techo eléctrico, el comando satelital de audio
desde el volante y el sensor de estacionamiento.
Con un 2,4 litros de 136 CV moviendo 1.770 kilos nadie puede esperar
prestaciones que ericen la piel. Se trata del mismo propulsor
naftero y algo anticuado que trae el Vectra Mercosur, pero en este
caso con 136 CV (en vez de 150), potencia que alcanza con lo justo.
Así y todo, las aceleraciones no están nada mal, con 12,7 segundos
para el 0 a 100 km/h y un consumo que no sorprende por lo austero:
10,25 litros cada 100 km a 130 km/h, y 13,5 litros en el ciclo
urbano.
A nivel funcionamiento el motor brilla por su suavidad, y la
vibración es casi nula a regímenes bajos, volviéndose más ruidoso en
alta. Por debajo de las 2.000 vueltas es algo “perezoso�, aunque
entrega la potencia en forma progresiva y es bastante elástico en
ciudad. La transmisión manual de cinco marchas tiene un selector
algo impreciso y gomoso, con una quinta que prácticamente mantiene
la velocidad máxima (172 kilómetros por hora) pero relaja el régimen
en unas 1.000 vueltas.
Por lo general, el comprador de este tipo de vehículos vive en una
ciudad, y por eso la mayor parte de los días de los SUVs transcurren
en ese paisaje. En ruta con un esquema de suspensiones independiente
para las cuatro ruedas, es estable, dobla sin excesivas
inclinaciones. El sistema de tracción integral All Wheel Drive on
Demand en condiciones normales es mayormente delantero, pero al
detectar pérdidas de adherencia a través de un control
electromagnético envía torque a las ruedas posteriores.
Son 131.480 pesos los que hay que pagar para tener el Captiva LT 2.4
en la cochera. En seguridad ofrece frenos con ABS, doble airbag,
faros antiniebla delanteros y traseros y apoyacabezas delanteros,
que además de regular en altura tienen cuatro posiciones para
acercarlos a la nuca. Por su precio se le pueden reclamar al menos
control de tracción y estabilidad, airbags laterales y ganchos
ISOFIX (esto último disponible en la edición 2009).
Dentro de su categoría –nafteros manuales, 4x4, cinco plazas y
entrada de gama, la única opción más económica que existe en el
mercado es el Jeep Compass Sport (122.600 pesos). Siguen los
japoneses Honda CR-V LX (136.000 pesos) y Nissan X-Trail Visia
(139.700), y ya más elevado en precio, también fabricado en Corea,
el Renault Koleos (148.700). Estos rivales en todos los casos
ofrecen propulsores nafteros de 170 caballos y, salvo por el Honda
-que emparda en equipamiento de seguridad-, tienen más dotación, con
airbags laterales, de cortina y control de tracción y estabilidad.
A FAVOR
Confort de marcha
Espacio interior
Buena terminación
Comportamiento dinámico
Garantía de tres años
EN CONTRA
Prestaciones modestas
Faltantes de equipamiento seguridad
Selector impreciso
Auxilio temporal
Ausencia tercera fila de asientos
Terra/Motorpress
Compartir este articulo : | | | | |
|
|