Desde el próximo jueves 15,
los bancos estarán obligados a informarle Central todas
las operaciones relacionadas con la compra de dólares
para los 10 días hábiles siguientes. Ninguna empresa
podrá acceder al mercado de divisas si no lo comunica
con antelación
A partir del próximo jueves
15, los bancos estarán obligados a informar al Central un detalle de
todas las operaciones relacionadas con la compra de dólares para los
próximos 10 días hábiles. De esta manera, ninguna empresa podrá
acceder al mercado de divisas si no le comunica esta intención a la
entidad financiera al menos diez días antes en relación con el
momento en que precisa los dólares, según publicó Ambito Financiero.
El encargado de formalizar esta nueva regla fue el gerente de
Exterior y Cambios de la autoridad monetaria, Jorge Rodríguez, un
hombre clave para el actual esquema que busca mantener bajo estricto
control lo que entra y, sobre todo, lo que sale en materia de
divisas. El sistema, que ya se había puesto en marcha en noviembre,
estipulaba que las entidades debían informar con 5 días hábiles de
antelación las operaciones a ser cursadas por el mercado de cambios.
Ahora se decidió duplicar el plazo, aclarándose en la misiva
dirigida a las cámaras bancarias que esta práctica será incorporada
como «modalidad de trabajo permanente». Asimismo, Rodríguez remarcó
a los bancos «la necesidad de habituar a los clientes a prever con
anticipación sus operaciones. En el futuro, los listados de ventas
de moneda extranjera a clientes sólo podrán modificarse como
excepción, en casos puntuales y con la debida justificación». Y por
último señala que «los listados de las operaciones de los próximos
diez días hábiles deberán ser confeccionados considerándose como
definitivos». De esta forma, si algún cliente llegara a necesitar
las divisas en forma imprevista, no podrá acceder al mercado de
cambios si no avisó con la debida antelación, salvo que el Central
acepte alguna excepción.
Se trata de la primera medida concreta que se perfecciona luego de
la conformación de la nueva Secretaría de Comercio Exterior, a cargo
de Beatriz Paglieri. Ella trabajará junto con el secretario de
Comercio Interior, Guillermo Moreno, y tendrán fuerte injerencia en
la política comercial y también en la cambiaria.
Por el nuevo sistema deberán pasar tanto las empresas que precisan
pagar importaciones, como aquellas que quieran girar utilidades al
exterior. De esta forma, el Gobierno contará con información muy
detallada de cada una de las operaciones que desean realizar las
empresas y el motivo por el cual busca acceder al mercado cambiario.
La antelación con la que deberán comunicar sus intenciones de
acceder a divisas le dará tiempo ya sea al Central o a Moreno a
denegar algunos de los pedidos.
No está claro si en este esquema ingresarán otras operaciones, por
ejemplo aquellas vinculadas con transacciones del público. Un caso
puede ser la compra de divisas a través de un crédito hipotecario.
Este sistema fue autorizado por la AFIP y el Central, pero es
posible que ahora también deba ser comunicado con esos diez días de
antelación. Lo mismo sucedería con la necesidad de acceder a dólares
para el pago de la tarjeta de crédito de clientes que efectuaron
compras en el exterior. Sin embargo, no parece ser el objetivo
principal por parte de la entidad que preside Mercedes Marcó del
Pont.
Para comprar dólares en una sucursal todo seguirá como hasta ahora:
habrá que pasar por el «filtro» de la AFIP para saber si el
individuo está autorizado para comprar divisas, de acuerdo con su
capacidad contributiva.
Las restricciones para acceder al mercado cambiario surgieron a
partir de fin de octubre, con las nuevas medidas de la AFIP para
controlar la compra de dólares. A través del BCRA y la secretaría de
Comercio Interior, se negó a muchas empresas a pagar importaciones,
pero sobre todo se exigió que esperen para girar utilidades al
exterior. Los empresarios esperan que estas limitaciones se vayan
ablandando a medida que el balance cambiario se vuelva más favorable
al Central, lo cual sucedería recién a partir de fines del primer
trimestre de 2012, cuando ingresen las divisas de la cosecha gruesa
. Fuente