Se trata de un desarrollo
sin antecedentes en la región, por el cual se produce
una reducción drástica de la información necesaria para
ver las imágenes en tres dimensiones, sin afectarlas en
cuanto a calidad
El formato tridimensional (3D)
podría recibir un fuerte impulso en la Argentina si las pruebas, que
están desarrollando investigadores universitarios locales, tienen su
correlato comercial.
El equipo del Laboratorio de Imágenes y Señales de la Universidad
Nacional de Tres de Febrero (Untref) creó un sistema de compresión
de datos que haría posible la televisión digital terrestre en 3D.
Se trata de un desarrollo tecnológico sin antecedentes en la región,
por el cual se produce una reducción drástica de esa información
digital necesaria para ver las imágenes en tres dimensiones, sin
afectarlas en cuanto a imagen como así tampoco en materia de audio.
Hasta ahora la transmisión de señales televisivas en 3D, grabadas o
en vivo, era patrimonio exclusivo de los sistemas de TV por cable o
satelital.
¿En qué consiste el avance argentino? Según explicó a
iProfesional.com, Mario Mastriani, coordinador del laboratorio, son
dos algoritmos con instrucciones ejecutables por una computadora o
por un chip. Uno de ellos es de súper resolución y el otro, de súper
compresión.
El origen de estas investigaciones fue una convocatoria del
Ministerio de Planificación Federal en 2009 realizada a siete
universidades nacionales para que generen software para la TV
digital terrestre abierta.
En el caso de la Untref, el foco estuvo puesto en la transmisión al
aire de la TV tridimensional.
En un trabajo en conjunto con científicos del Laboratorio de
Investigación y Formación en Informática Avanzada de la Universidad
Nacional de La Plata (Lifia), se generó un programa que va entre la
cámara y los dispositivos que tiene el canal para las transmisiones
de la TV digital terrestre.
Mastriani señaló que esta creación permite la cuadruplicación de la
información. Así, en el mismo espacio en el que se puede ubicar un
canal se podrían transmitir cuatro.
Por el lado del hogar, entre el set-top-box (caja sintonizadora) y
la TV se debe usar un dispositivo que descomprimen las imágenes.
Para ello, la Untref trabaja con la Universidad Nacional del Sur
(UNS), de la ciudad bonaerense de Bahía Blanca, con el fin de
producir un chip que se incluiría directamente en el STB.
La UNS eligió este sistema para ser aplicado en un chip de
desarrollo nacional del programa de asistencia a la TV digital
argentina. Este procesador podría fabricarse en masa en China u otra
nación extranjera.
Mastriani resaltó que, antes de este desarrollo, se dependía de tres
fabricantes estadounidenses de placas receptoras, los únicos en el
mundo. Con esta creación, se podrá eludir ese oligopolio.
Así, con la generación del software a cargo de la Untref y el diseño
del chip en la UNS, se trasladaría su fabricación a otras naciones y
a costos mucho más bajos.
El nuevo sistema fue puesto a prueba el 2 de diciembre desde las
instalaciones de Canal 7, el primero que respondió al pedido de la
Untref. El experimento resultó exitoso, en el marco de esta
investigación que permitirá, en el mismo ancho de banda que ocupa un
canal de TV de alta definición (HD), enviar cuatro veces más
información y brindar servicios en calidad 3D.
Mastriani explicó que la prueba fue sencilla: una cámara enfocada a
un pasillo de la emisora de Figueroa Alcorta y Tagle, en Buenos
Aires, y cuyas imágenes fueron emitidas en vivo.
Dicha prueba demostró que se puede transmitir 1080-3D en el bit-rate
(tasa de bits, de 1080i-2D), es decir cuatro veces más datos con el
mismo ancho de banda, sin pérdida de calidad.
Así, se enviaron por aire imágenes tridimensionales con calidad de
imagen Full HD.
El principal logro de la Untref fue el desarrollo de un catalizador
de compresión que potencia la acción del codec AVC/H.264/MP4-10,
propio de la norma japonesa-brasileña (ISDB-T).
Este sistema es un algoritmo, el cual consiste de un conjunto de
instrucciones lógicas susceptibles de ser ejecutadas sobre una
computadora, procesador o chip.
La súper resolución desarrollada, engranaje fundamental de la súper
compresión, permite controlar la resolución de los cuadros de video,
al tiempo que realza la nitidez, eliminando los defectos en la
recuperación de la imagen en el receptor.
Las mediciones de calidad de imagen, latencia y bit-rate arrojaron
resultados positivos y fueron hechas en presencia de técnicos de
Canal 7 y de la UNS.
“Este tipo de desarrollos permitirá optimizar no solamente, como en
el caso de esta prueba, el uso del espectro en las transmisiones
televisivas, sino también, el intercambio de contenido en redes
digitales utilizando un menor ancho de banda de conexión”, afirmó
Mastriani.
La prueba posiciona a la Argentina entre los países a la vanguardia
de esta tecnología y responde a la política de investigación y
desarrollo desplegado por el Gobierno nacional a través del Consejo
Asesor de la Televisión Digital Terrestre y el plan nacional de
telecomunicaciones “Argentina Conectada”.
Las imágenes fueron captadas con una cámara Panasonic 1080p-3D,
mientras que el encoder utilizado fue fabricado por la empresa NEC.
Luego de viajar por una de las antenas del sistema argentino de TDT,
la señal fue decodificada por un sintonizador de ISDB-T conectado a
una computadora con placas de video de entrada y salida Nvidia SDI y
Nvidia Quadro 6000.
La señal obtenida se procesó por un monitor de actividad de TV de 3D
en alta definición, mientras que la salida se conectó a una pantalla
de 3D, también de Panasonic, de 50 pulgadas.
Contenidos
Por supuesto, junto o después del despliegue comercial de la
solución tecnológica, deberán llegar los contenidos especiales para
el 3D, con cámaras estereoscópicas, complementarias para dar
sensación de profundidad.
Aquí se encuentra la posibilidad comercial del desarrollo de la
Untref y la UNS, una oportunidad detrás de la cual están fabricantes
electrónicos y creadores y distribuidores de contenidos.
Se trata de llevar el sistema de tres dimensiones al hogar. Por
ahora, es una etapa aún onerosa para la enorme mayoría de los
consumidores: una TV para ver en 3D cuesta en la Argentina desde
$8.000 y puede llegar a los $20.000.
Pero la investigación argentina comprobó que se puede realizar la
transmisión en vivo en 3D por sistemas abiertos, y no restringidos,
como la TV por cable o la satelital.
Así, se pueden reproducir las experiencias que ya se hicieron desde
el último año, con la transmisión de algunas instancias de eventos
deportivos de alcance planetario, como el Mundial de fútbol
Sudáfrica 2010; el abierto de tenis de Francia en Roland Garros,
París; y el Masters de golf en Augusta en los Estados Unidos, que ya
se pudieron ver en tres dimensiones.
Además, el desarrollo de los investigadores puede comercializarse en
Brasil (en 2012 allí se jugará el Mundial de fútbol y en 2014, los
Juegos Olímpicos) y los países vecinos, que tienen el mismo formato
de TV digital, aunque Mastriani resaltó que el software también
permite ser empleado en las otras normas, la estadounidense (ATSC) y
la europea DVB-T).
¿Cuándo comenzará el despliegue comercial? Para el investigador,
hace falta una intervención del Gobierno nacional para ello, aunque,
por ahora, mantienen contactos con una fábrica en San Luis para
instalar esta tecnología en los decodificadores que entrega el Poder
Ejecutivo y para que pueda colocarse en forma interna en los
televisores que captan de manera nativa, sin accesorios, las señales
de la TV digital abierta.
Fuente: Tomá mate y avivate