Alberto y Guido estaban juntos de picnic en un
bosque cuando Guido, de 45 años, empezó a sentirse mal hasta tal
punto que se desplomó falleciendo de un infarto fulminante.
Alberto fue a su ayuda gritando, llorando y
desesperado y terminó en el suelo junto a su hermano. Al poco tiempo
murió también de un ataque al corazón. Un helicóptero se acercó a la
zona pero ya era tarde para ellos, nada se pudo hacer.
El tercer hermano se encontraba en un hospital
visitando a su anciana madre, cuando de repente también sufrió un
infarto. Fue trasladado a la zona de urgencias y, gracias a que ya
se encontraba en un hospital, pudieron salvar su vida.
Fuente: noticiasinsolitas.info