En una decisión de fuerte impacto político, la Sala I de la Cámara Federal porteña resolvió hoy apartar al juez federal Daniel Rafecas del caso Ciccone, por lo que la causa tendrá un nuevo magistrado que será sorteado este viernes.

Los camaristas resolvieron separar a Rafecas luego de la recusación presentada por el socio y amigo de Boudou, José María Núñez Carmona, quien lo acusó por falta de "imparcialidad".

Así lo confirmaron a Noticias Argentinas fuentes judiciales, las que precisaron que el fallo de Eduardo Freiler, Eduardo Farah y Jorge Ballestero fue "unámine".

La misma sala sorteará este viernes por la mañana al juez que se hará cargo de la causa, quien a su vez deberá evaluar la recusación presentada contra el fiscal del caso Carlos Rívolo con argumentos similares a los que se acusó a Rafecas.

El magistrado había sido recusado por la defensa del empresario Nuñez Carmona, el abogado Diego Pirota, quien reiteró ante la sala su pedido para apartar al magistrado de la causa en la que está involucrado Boudou por irregularidades en la venta de la imprenta Ciccone Calcográfica.

En su planteo, Pirota recusó a Rafecas al considerar que incurrió en "falta de imparcialidad" al brindar una entrevista al diario Perfil e intercambiar mensajes de chat con el abogado Ignacio Danuzzo Iturraspe, en los que se refirió al avance de la causa que involucra al vicepresidente y al presidente de la nueva Ciccone, Alejandro Vandenbroele.

Para los camaristas, la única causal de recusación del juez fueron los mensajes que mantuvo con Danuzzo Iturraspe, pero no las declaraciones que dio a Perfil.

"Es correcto no identificar las expresiones publicadas por el diario Perfil con la causal de prejuzgamiento prevista como motivo de apartamiento" porque "lo cierto es que el magistrado no adelantó juicios ni exhibió una voluntad de comprometer a José María Nuñez Carmona ni a otros imputados".

En ese punto, los jueces coincidieron en rechazar la acusación por no haber preservado debidamente el secreto de las actuaciones, lo que consideraron que no es "suficiente para apartarlo" por ello.

No obstante, sí consideraron causal de recusación los mensajes que por chat de "Whatsapp" mantuvo Rafecas con el abogado Danuzzo Iturraspe.

"No es posible considerar a Danuzzo Iturraspe un extraño ajeno al proceso. Como el mismo Rafecas lo reconoce, el abogado estaba mencionado como integrante de una sociedad que había aparecido relacionada –aclara, "en los medios periodísticos- con algunos hechos objeto de la causa", dijeron los jueces.

Además tuvieron en cuenta que Danuzzo Iturraspe reconoció ser abogado de Nuñez Carmona desde 2008 y "había concurrido a ver al magistrado al empezar la causa para iniciar de ahí en más un diálogo acerca de las distintas cuestiones que se estaban investigando y acerca del desarrollo procesal" de la misma.

"El intercambio no ocurrió entre el juez y un extraño, sino entre el juez y un abogado de su confianza íntimamente allegado a uno o más imputados", concluyó la Cámara.

La Cámara recordó que –de acuerdo a lo dicho por Danuzzo Iturraspe- lo que le confió el juez Rafecas "no respondían a saciar su simple curiosidad sobre el caso sino a utilizarlo de vía para que cierta información llegase a Nuñez Carmona, y posiblemente, a otros imputados".

Sobre la afirmación de Rafecas sobre que sus dichos no eran "directivas", los camaristas refutaron: "bastan los consejos y opiniones pues el acento está puesto en la trascendencia de que estos provengan del propio juez de la causa, incluso sin importar su buena fe".

"Acreditada por circunstancias objetivas una causal expresamente prevista por el legislador, que da sustento serio y razonable al temor exteriorizado por el recusante, resulta obligado el apartamiento de Rafecas, sin que sea necesario abordar otras razones invocadas por el recusante", concluyeron en el fallo.

Tras la designación del nuevo juez de la causa, la primera medida que tendrá que resolver el magistrado es si confirma o no al fiscal Rívolo al frente de la investigación ya que fue recusado por Pirota a raíz de un allanamiento que ordenó del departamento del Vicepresidente de la Nación.

Previamente, la causa por la venta de Ciccone Calcográfica ya había sido motivo de disputa de competencia entre Rafecas y el juez Norberto Oyarbide.

Oyarbide había recibido una denuncia anterior por hechos similares pero finalmente resolvió inhibirse y que se unificara con aquella que tramitaba Rafecas.

La sospecha es que Boudou habría intervenido para que se levantara la quiebra decretada por pedido de la AFIP a la Justicia Comercial a la imprenta.

De esa manera, habría logrado que la ex Ciccone Calcográfica le fuese vendida a la firma The Old Sun, propiedad de Alejandro Vandenbroele, de quien se sospecha es allegado del Vicepresidente de la Nación, al punto de que su ex mujer lo señaló como "testaferro" . Fuente