Ese cargo se ajustó en
hasta un 248 por ciento, y con el nuevo mecanismo de facturación
prorrateada, las boletas reflejan un significativo incremento.
Por caso —según publicó el
diario Clarín— hace un año, un usuario residencial de la categoría
R3 4, cuyo nivel de consumo anual supera los 1.800 metros cúbicos,
pagó por una factura de 25 metros cúbicos del sexto bimestre unos 25
pesos: ahora, la nueva boleta con subsidio que recibió por un
consumo similar entre octubre y diciembre pasados subió casi un 550
por ciento, a 162 pesos.
Sin los aportes
estatales traducidos en subsidios, el mismo usuario podría pagar 417
pesos en el bimestre.
El cargo específico en
cuestión se creó en 2008 para atender las importaciones de gas, y
actualmente representa entre el 50 y 80 por ciento del segmento
variable de la tarifa.
A mediados de noviembre
último, el Ente Nacional Regulador del Gas (ENARGAS) introdujo dos
modificaciones a ese cargo.
Primero, extendió su
aplicación a todos los hogares de bajos y medianos consumos que
estaban excluidos del pago.
Por ejemplo, a los hogares
de la región metropolitana con consumos de hasta mil metros cúbicos
anuales que no tenían ese cargo, se les facturará un adicional por
cada metro cúbico consumido que oscila entre los 0.087 y 0.131 peso.
En segundo lugar, elevó
hasta un 248 por ciento el cargo para los clientes de medianos y
altos consumos que ya lo venían pagando.
Según analiza Noticias
Argentina, en este caso, para los consumos que van de 1.000 a 1.250
metros cúbicos anuales, el cargo saltó de 0,050 a 0,174 peso, y
para los consumen más de 1.800 metros cúbicos anuales, pasó de 0,270
a 0,940 peso.
Ahora, las distribuidoras
tienen que tomar volumen total de gas demandado en 2011 y
multiplicarlo por el nuevo valor del cargo tarifario que le
corresponda a cada usuario.
Y la cifra que resulte
deberá ser prorrateada en seis cuotas iguales y trasladada a las
próximas boletas bimestrales.
Equipo de Economía de Tribuna de Periodistas http://periodicotribuna.com.ar