El crecimiento económico pero,
principalmente, el reverdecer del consumo personal incentivó el
regreso de muchas marcas que habían decidido abandonar el mercado
local hace algunos años. Este es el caso de la cadena de comidas
rápidas estadounidense Wendy?s, que mañana marcará su retorno a la
Argentina.
Aunque ninguna compañía de consumo masivo elige de manera aleatoria
el lugar en donde abrirá su primer restaurante, la ubicación en
donde Wendy’s dará su primer paso en su regreso al mercado local en
la Avenida Cabildo entre las calles Olazabal y Mendoza? plantea el
principio de una guerra en el negocio de la comida rápida.
Pero en lo que parece ser una alegoría de como está creciendo la
competencia en el mercado del fast food, el regreso de Wendy’s al
país se hace con un local a una cuadra del primer local que Arcos
Dorados inauguró hace 25 años, y a una cuadra y media de otro de
Burger King.
Pero como si no fuera suficiente la congestión de opciones para este
tipo de comidas, en poco tiempo más se sumará a ese radio de dos
cuadras la cadena argentina Mostaza.
Wendy’s llega para enfrentarse a un mercado que tiene una tasa de
crecimiento que ronda el 8% anual y en donde Arcos Dorados es quien
posee el mayor pedazo de la torta. McDonald’s cuenta con 200
restaurantes en todo el país y una facturación de algo más de u$s
400 millones en la Argentina.
En segundo lugar queda la empresa del fondo Alsea, Burger King, con
58 locales. Y el tercer escalón Mostaza, con 32 locales y una fuerte
presencia en shoppings del interior y grandes supermercados.
La vuelta de la casa de hamburguesas, se realiza de la mano de un
grupo de empresarios que conformaron la compañía Desarrollos
Gastronómicos (Degasa).
Degasa está conformada por Guillermo Stanley, Carlos Giovanelli,
Damián Pozzoli y Osvaldo Peruzzini del fondo de inversión Desarrollo
& Gestión de D&G sólo no participa el ex jefe de gabinete de De la
Rúa Chrystian Colombo junto a socios del Banco Patagonia, de la casa
de cambios Puente Hermanos y ex accionistas de Arcor. Dicen que
Colombo no se sumó al desarrollo porque no le gustaba la idea de ser
una franquicia.
Según confiaron a este diario fuentes del grupo, la estrategia es
abrir seis locales durante 2012, y encarar un plan de expansión
general que incluye 50 restaurantes.
Wendy’s había desembarcado en la Argentina en 1996 y en el 2000,
cuando decidió emprender la retirada, operaba 18 locales en todo el
país, empleando a 800 personas.
En ese momento, desde su casa matriz en los EE.UU. se decidió casi
de manera intempestiva emprender la retirada afectada por la
recesión del mercado local y por problemas de gerenciamiento que la
llevaron a acumular pérdidas operativas por 3,2 millones de dólares.
Según había publicado este diario el año pasado, en el mercado se
especuló además con que la cadena norteamericana no había generado
sinergias entre su oferta gastronómica y los gustos del consumidor
local, creyendo que el formato que funciona exitosamente en Estados
Unidos también lo iba a hacer en el país, sin encarar mayores
cambios.
De hecho, llegó a posicionarse como la la tercera cadena de fast
food en el país, detrás McDonald?s y Burger King, aunque lejos de
estas dos.
Fuente:
http://www.cronista.com