La mujer sufrió un paro
cardíaco mientras daba a luz a Zahra, en su casa. Fue trasladada al
hospital, pero no hubo nada que hacer, aunque la pequeña ha
sobrevivido, cuenta Daily Mail.
Sucedió en Melbourne (Australia). El suceso ha reabierto la polémica
sobre la seguridad de los partos en casa. Lovell había vivido media
vida presionando al Gobierno para conseguir ayudas estatales para
las mujeres que querían tener los partos en su hogar. En una de las
cartas que escribió denunciaba: “La vida estará en peligro sin la
ayuda de matronas adecuadas por parte del Estado". Y así ha sido.
En esa misma carta lamentaba que como madre no iba a tener más
remedio que tener un parto sin asistencia en el hogar, "este es el
lugar quiero dar a luz a mis hijos".
Una de las matronas que asistía a Lovell aseguró que la causa de su
muerte podría ser una hemorragia, aunque los hechos aún se están
investigando.
Durante la última década, ha habido un aumento de mujeres de clase
media que optan por partos en el hogar. Mientras que en Reino Unido
las mujeres cuentan con matronas estatales, en Australia, las
mujeres embarazadas deben encontrar una privada