"El santo grial de la
cardiología es identificar la placa aterosclerótica mientras se
rompe", ha explicado a la agencia SINC Eric Topol, investigador de
The Scripps Research Institute de California (EE UU) y coautor del
trabajo.
En su investigación, publicada en la revista Science Translational
Medicine, Topolo y sus colegas analizan la morfología de las células
endoteliales circulantes (conocidas por las siglas CEC) para
determinar el riesgo de accidente cardiovascular. Se trata de
células grandes, sin forma, con tendencia a tener más de dos núcleos
y a aparecer en clústeres. Los investigadores analizaron cultivos
para caracterizar las células anormales procedentes de la superficie
de los vasos sanguíneos de 50 individuos con antecedentes de
accidentes cardiovasculares y de 44 participantes sanos. Los
resultados revelaron diferencias notables en las CEC de los dos
perfiles de paciente. Además, una de las principales conclusiones
sugiere que las células endoteliales circulantes en los pacientes
con ataques al corazón podrían ser un 400% superiores que en
personas sanas.
Topol subraya que "las CEC de un ataque al corazón fueron
identificadas correctamente en más del 90% de los casos", lo que
refuerza la idea de que niveles elevados de CEC son índices de
predicción independientes para impedir un ataque de corazón. Por
eso, es muy probable que "este test se convierta en una prueba
rutinaria para aquellos que puedan sufrir un infarto", como
pronostica Eric Topo . Fuente