Cientos de miles de personas coparon las calles del país europeo contra la reforma laboral y el ajuste decretado por el presidente conservador Mariano Rajoy. El último balance del Ministerio del Interior habla de 58 policías y 46 ciudadanos heridos, así como también al menos 180 detenidos.

Los sindicatos, que lograron una amplia convocatoria al paro (hablan de un 77% de acatamiento y casi el 100 % en la industria) centralizan sus acciones en las calles de Madrid y Barcelona, aunque al clima de protesta se sumaron casi todas las ciudades españolas, sumando un total de 381 manifestaciones en todo el territorio.

Mientras tanto, el gobierno del Partido Popular afirmó que las marchas se desarrollaron "con normalidad", aunque sin embargo se registraron incidentes en distintas localidades del país.

En las primeras horas de la huelga ya se habían registrado más de 60 detenciones y al menos 20 heridos por choques entre la policìa y los manifestantes, principalmente en Barcelona.

En total, los principales sindicatos convocaron más de un centenar de protestas. Junto con de Madrid y Barcelona, miles de personas salieron también a las calles de ciudades como Valencia, Bilbao o Alicante, donde la policía dijo haber contado alrededor de 40 mil personas. La marcha de Madrid llegó hasta la Puerta del Sol. 

La marcha más multitudinaria, la de Sevilla, debiò adelantar una hora la salida de su cabecera por el gran número de personas que se habían congregado. En tanto, en Galicia, donde también se celebraron manifestaciones,  la convocatoria fue masiva. En el conjunto de ciudades gallegas, se estima que la participación fue de más de 200 mil personas, aunque los sindicatos hablan de un millón de convocados