Los
patentamientos cayeron casi un 4% en comparación al
mismo mes del año pasado y un 49% en relación a enero.
Las trabas a las importaciones, las demoras en las
entregas de los modelos locales y los feriados
turísticos impactaron en la actividad. La opinión de los
expertos
El boom automotriz sufrió su primer traspié desde
fines de 2009, al caer las ventas casi un 4% en febrero en
comparación con el mismo mes del año anterior.
Con una industria automotriz que crecía a pasos
agigantados la noticia cayó como "un balde de agua fría", teniendo
en cuenta que en enero, a pesar de las dudas y los miedos, el
incremento interanual llegó a 8 por ciento.
Tal como adelantó a iProfesional.com Dante Álvarez,
vicepresidente de la Asociación de Concesionarios de la República
Argentina -ACARA-, las ventas alcanzaron el último mes las
58.063 unidades, contra las 59.807 del año pasado. En enero
se habían patentado 112.607 unidades, superando las 100.964 del
mismo mes de 2011.
Desde ACARA justificaron que el motivo de la caída
es que "este año hubo dos días hábiles menos que en febrero pasado".
Sin embargo, diferentes expertos suman a ese
argumento el de un menor interés de los argentinos por
cambiar su auto por el temor a invertir los ahorros, algo
que queda en evidencia al registrarse una baja importante de las
consultas en los concesionarios.
Crecimiento moderado
La caída de febrero fue sorpresiva porque para este
año se esperaba un repunte más moderado, pero no se pensaba
en ningún momento en una reducción de los márgenes logrados durante
anteriormente.
"Hoy por hoy la capacidad instalada es suficiente para acompañar las
previsiones, que son de crecimiento, pero más moderado",
afirmó Carlos Gomes, presidente de PSA para América latina, durante
la presentación del 308.
En tanto, Luis Ureta Sáenz Peña, presidente de la
filial local y ex embajador argentino en Francia, ratificó el
concepto: "Tampoco creemos que todo puede crecer permanentemente al
30%. Para 2012 veo un crecimiento mucho más paulatino",
justificó.
En la misma línea, desde Abeceb.com, explicaron algunos factores
adicionales que están relacionados directamente con la reducción de
ventas y que impactan en el sector.
Maximiliano Scarlam, economista experto en la industria automotriz,
comentó que la caída del último mes tiene una serie de antecedentes
que demuestran cómo la actividad ha ido creciendo pero a menor
ritmo.
"El nivel de ventas viene disminuyendo desde
la segunda mitad de 2011 si se tienen en cuenta los
patentamientos bimestrales. El último bimestre de 2010 fue el de
mayor suba de los últimos años con un 49% en comparación con el
período previo; desde septiembre de 2011 el crecimiento, cada dos
meses pasó a un porcentaje de 30% y a partir de ese mes hasta fines
del año pasado fue de 17%", destacó el experto.
Esta tendencia se hizo más firme este año, con un
crecimiento bimestral que, entre enero y febrero no llega al 4 por
ciento.
Algunos de los argumentos que señalan los expertos del por qué de
esta desaceleración están vinculados con:
-
La mejora en la capacidad de compra de los
argentinos, que ya no crece como antes.
-
El mayor peso del endeudamiento en las
familias.
-
Créditos bancarios que se "estacionaron" en
niveles más caros que los de tiempo atrás.
Vientos de cambio
La demora en la entrega de 0km es
otro de los problemas que afecta al sector, ya sea que se trate de
modelos de fabricación nacional -por las dificultades para ingresar
autopartes y cumplir con la producción-, o bien importados, por las
trabas que se registran en la Aduana.
Algunos concesionarios dieron cuenta del retraso. En
Taraborelli, agente oficial Fiat, explicaron que en los vehículos
que llegan desde México o Turquía hay demoras de hasta 90
días. Lo mismo sucede en algunos puntos de venta de
Chevrolet y de Ford que fueron consultados por este medio.
En este sentido, se advierte sobre los productos extrazona,
que muchas veces se retrasan más de la cuenta. De acuerdo a la marca
y modelo, "todavía existen grandes inconvenientes para ingresar los
vehículos", comentaron desde una firma de alta gama.
En cuanto a las consultas del público,
también los vendedores detectan cambios ya que hay muchos
interesados pero se concretan menos operaciones.
"La gente recorre los salones de venta, pregunta y
averigua por los nuevos modelos, más teniendo en cuenta que las
marcas están muy activas. Sin embargo, a la hora de concretar y de
tomar la decision, aparecen más temores y dudas que en los
últimos años", explicó el responsable de ventas de un
concesionario de Avenida Córdoba.
Otro aspecto que golpeó a la industria en los
últimos meses fue la reducción del impuesto a los autos de
lujo, que antes se aplicaba a aquellos modelos que tenían
un valor superior a los $200.000 (antes de impuestos), y que ahora
impacta en aquellos que arrancan en los 150.000 pesos.
Modelos como la SW4 de Toyota o la Santa Fe de
Hyundai han sido algunos de los más afectados, dos vehículos de gran
participación en el mercado que en el caso del SUV coreano tuvo un
importante crecimiento en los últimos años.
El impacto de esta medida es aun mayor teniendo en cuenta que la
recuperación de la industria automotriz se vio impulsada, en los
últimos meses, por un creciente protagonismo de los vehículos de
alto valor, cuando el segmento chico y de entrada de gama fue el que
movió, históricamente, la aguja del sector.
La reacción de las
marcas
Con esta luz amarilla que se prende en el sector, se
descarta que las compañías se mantengan muy activas en cuanto a agenda
de lanzamientos y la política de precios.
En el primer caso, para el año se espera la llegada
de más de 70 nuevos modelos y restyling. En
general, desde las automotrices coinciden en que mantener al cliente
expectante, con muchas novedades y sorpresas, ha sido uno de los
factores que permitió llegar a una industria con tanto impulso.
La presentación de las marcas en Pinamar, considerado el salón a
cielo abierto que anticipa lo que pasará en el año, ya fue una señal
de las propuestas que se sumarán en el mercado durante 2012.
En cuanto a los precios, desde ACARA confirmaron que
seguirán con subas del 1 a 1,5% mensual, con lo cual el incrementó
seguirá corriendo por debajo de la inflación .
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